- Definitivamente, nos ha tocado vivir tiempos extraordinarios. En China, al despedirse los amigos o familiares para alguna travesía, los parabienes incluyen la expresión “porque vivas tiempos interesantes”, aludiendo a las circunstancias que cada quien habrá de enfrentar y que podrían darle sentido a una vida o a una época.
2. Hace seis meses, pocos podían imaginar el impacto lesivo de una pandemia en la vida cotidiana, en las actividades productivas y en la economía global. Ahí están las sucesivas advertencias de la OMS, que año con año publica los datos relevantes para la salud, señalando que las gripes estacionales causan 5 a 6 millones de contagios y provocan la muerte de 300 a 600 mil personas en la temporada invernal, ante lo cual los sistemas de salud nacionales resultan insuficientes por la escasez de recursos así como la insuficiencia recurrente de vacunas y medicamentos. Ante ello, alertaba la OMS, una enfermedad viral nueva significaría un riesgo extraordinario, que tendría también efectos impredecibles. Finalmente, los llamados de Pedro respecto del lobo fueron ciertos y cuando el coronavirus apareció en China y luego se esparció vertiginosamente por el mundo, los sistemas de salud fueron insuficientes para atender los millones de contagios, que han causado la muerte de más de 400 mil personas, más de 14 mil en nuestro país.
3. El impacto en la economía es impresionante. Cada día los escenarios catastróficos se actualizan, pasando de las previsiones leves hacia los daños profundos a las cadenas productivas, cuyos costos podrían significar hasta un 9% del producto global, que, como suele suceder, se distribuye asimétricamente, afectando más a los países más vulnerables, con mayor dependencia en sus ingresos por materias primas, petróleo, agroproductos y turismo, cuyas cuentas nacionales registran mermas considerables al caer los mercados mundiales. La perspectiva de una pronta recuperación al reanudarse las actividades no apunta a ser tan rápida como fue la caída, sino tendría un comportamiento gradual, similar a una “U” dice el Banco de México, o de una “palomita” parecida al logo de Nike, como señala el secretario de Hacienda mexicano, pero no será inmediata. En las estimaciones del Banco Mundial, la caída del producto interno de México sería de un 7.5%, con una recuperación en 2021 del 3%, sustentado sobre todo en acuerdos comerciales como el trilateral con Estados Unidos y Canadá, en vigor a partir del 1º de julio próximo.
4. Pronto, muchos de los países enfrentados a la recesión provocada por el coronavirus tendrán elecciones generales. Los gobiernos enfrentarán el juicio de los electores y habrán de rendir cuentas en la arena pública, prueba máxima de la democracia. En Estados Unidos, en noviembre próximo el presidente Trump arriesga la reelección y el Partido Republicano la mayoría en el Senado así como varias gubernaturas. Al momento, las encuestas abiertas ubican la carrera presidencial en términos adversos a los republicanos, afectados también por las tensiones raciales y sociales que últimamente han desnudado la desigualdad prevaleciente en la Unión Americana. Las encuestas muestran un 41% favorable a la reelección, contra un 48% que estaría por el cambio, representado por Joe Biden quien ni siquiera ha iniciado su campaña, restando un 10% de indecisos para inclinar la balanza.
5. La pandemia del Covid ha mostrado la fragilidad de los sistemas nacionales de salud, los cuales deberán inexorablemente rediseñarse para enfrentar el reto de proteger la salud, que ya se vio, es uno más de los temas globales, como el cambio climático, las migraciones, la seguridad, las adicciones o el comercio. Son tiempos extraordinarios, como extraordinarias habrán de ser las decisiones económicas, sociales y electorales a definir en el futuro inmediato.