El jefe de la Oficina Especial de la CNDH para el caso Iguala, José Larrieta, dijo a los padres de familia que el expediente sobre la desaparición y presunta muerte de los 43 normalistas se encuentra abierta y les garantizó que no dejarán un cabo suelto en la investigación.
La Procuraduría General de la República (PGR) dio por cerrado el caso tras informar que los estudiantes sí fueron asesinados y calcinados entre el 26 y el 27 de septiembre en un basurero de Cocula.
Hoy se reunieron los familiares con el ombudsman nacional, Luis Raúl González, se reunieron para analizar las observaciones que hizo la ONU a México en materia de desaparición forzada.
El encuentro se realizó en la sede del ‘Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez’, en donde el vocero de los familiares, Felipe de la Cruz, respaldó al titular de la CNDH por su trabajo en la investigación de los estudiantes.