Apoyos masivos

25 de Abril de 2024

Enrique Del Val
Enrique Del Val

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enrique del val

Los datos económicos reflejan crudamente la realidad de lo que está pasando en todo el mundo con la pandemia y sus efectos perniciosos y terribles que acarrea en materia de desigualdad, pobreza y hambre en varios países, incluyendo destacadamente al nuestro.

En las últimas páginas de la revista The Economist siempre dan indicadores de la situación macro de más de 40 países de todos los continentes. En su número más reciente las proyecciones del Producto Interno Bruto (PIB) son de caída para todos, con excepción de China e Indonesia. Para México la calculan en -9.2%, siendo de las más altas de 42 países.

También el balance presupuestario es negativo para todos y la mitad tendrán cifras negativas de la balanza en cuenta corriente, incluyéndonos. Por lo que respecta al desempleo, la cifra para México es de 3.3% para marzo, cifra que se puede prestar a toda una serie de interpretaciones y que, sin duda, no es la que refleja la realidad de empleo en México con la terrible informalidad que tenemos y de la cual viven hoy millones de personas que están angustiadas, no por su futuro sino por su presente. Los datos provienen de las autoridades de cada país.

Por último, las 34 bolsas de valores más importantes del mundo, con excepción de tres: el Nasdaq de Estados Unidos, las de Argentina y China, tienen números negativos con respecto a diciembre de 2019.

Ante esta situación, varios países han tomado decisiones inusuales y rápidas ante la urgencia de atender la crisis social de millones de personas que de pronto se encuentran sin sustento económico para alimentar a sus familias.

Sabemos de los billones de dólares que el gobierno estadounidense está destinando para paliar la crisis de desempleo masivo que está ocurriendo. Vemos que en España, durante mayo se aprobó un denominado “ingreso mínimo vital”, que lo estarán recibiendo 255 mil personas este mes y se pretende que llegue a 850 mil hogares.

En Italia han creado el “ingreso ciudadano”, además de otras medidas de emergencia en materia de hipotecas y la prohibición de de-
salojos de personas que no puedan pagar la renta o hipoteca.

Francia ha dado incluso un paso adelante, a mi juicio, poniendo sobre la mesa el tema de la deuda pública porque, entre otras cosas, se calcula que para el fin de año la deuda pública francesa alcanzará el 115% del PIB. La cifra registrada en el Banco Central Europeo de deuda pública de los países miembros es de dos mil millones de euros. Incluso, el Presidente francés ha creado una comisión internacional de expertos para buscar salidas a la crisis.

Muchos políticos y académicos están proponiendo la cancelación de esta deuda, misma que constituía un gran problema para varios países antes de la Covid-19, como Italia, cuya deuda pública alcanza el 135% del PIB.

He citado algunos casos, pero la realidad es que muchos otros países han destinado recursos extraordinarios y en gran cantidad para aliviar la situación económica de sus ciudadanos, cosa que hasta la fecha no ha ocurrido en México. Si nos atenemos a las cifras que están siendo publicadas por diversos organismos nacionales e internacionales, en donde dan cuenta de que entre seis y 10 millones de mexicanos estarán pasando a la clasificación de pobres, veremos que más de la mitad de los 120 millones que somos estarán en pobreza este año.

Y la pobreza trae el hambre de las familias y el hambre conlleva a la desesperación, y ésta a la violencia y el caos. Ante esta situación hemos insistido por muchos lados, y se refleja en los medios de comunicación, en la necesidad de que el gobierno analice y, en su caso, tome en cuenta las propuestas que se le han hecho para paliar la situación social que se le viene encima, porque de seguir en la ruta neoliberal en lo económico la pobreza y el hambre seguirán creciendo.