Una veintena de afganos mutilados por la guerra comenzaron el martes a recorrer cientos de kilómetros hasta la capital, para exigir la paz entre el gobierno y los talibanes.
De acuerdo con información de la policía local, un kamikaze hizo estallar los explosivos que llevaba frente a las oficinas del ministerio de Desarrollo Rural en Kabul.
La catástrofe se produjo por una subida repentina de las aguas del lago, situado en lo alto de la aldea de Peshghor, en el distrito de Khenj, causada por el derretimiento por las altas temperaturas estivales
Los reporteros que murieron en un atentado en Kabul se convirtieron en mártires y símbolo de una fecha de recuerdo para sus colegas asesinatos en el mundo