También fue Myrta en Xochimilco y una menor en Tonalá

La conmoción que se vive en el país por los feminicidios de Luz Raquel Padilla en Zapopan, Jalisco, y de Margarita Ceceña en Morelos, no han dejado tiempo para comprenderlos por completo por la nueva información que surge de ambos casos, cuando salió a la luz dos nuevos asesinatos de mujeres.

El primero de ellos corresponde al presunto asesinato de una niña de 11 años la cual murió a manos de empleados de un albergue en Tonalá, Jalisco. La menor de edad padecía un trastorno del sistema nervioso central conocido como epilepsia.

En su último episodio de índole neurológico, los empleados del albergue donde se encontraba por tener problemas de salud mental, la roció con alcohol para tratar de controlarla y después le aplicaron una descarga eléctrica con una máquina.

La directora de Quejas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ), Érika Córdova, dio a conocer esa narración de los hechos y dijo que “esas chispas fueron las que provocaron el daño de quemaduras, estamos hablando de tortura, indudablemente”.

La CEDHJ dio aviso al Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura de la Comisión Nacional de Derechos Humanos para que intervenga en el caso que ocurrió en el albergue privado ubicado en la colonia Santa Paula.

Hasta el momento, la Comisión desconoce si el lugar cuenta con los permisos necesarios para operar, pero aclaró que el Mecanismo cuanta con las facultades para ingresar de manera inmediata al sitio por tratarse de una Asociación Civil.

A Myrta Itzel la quemaron

El feminicidio de Myrta Itzel, de 45 años de edad, estuvo precedido por maltrato y violencia física por parte de su pareja sentimental identificado como Arturo Hernández. Yessica, la hija mayor de Myrta, refirió en una entrevista para el programa C4 en Alerta, con el periodista Carlos Jiménez, que todo comenzó el Xochimilco.

Narró que se dio cuenta del maltrato que recibía su madre cuando llegaron a vivir con ella. Explicó que la muerte de la hija menor de Myrta, Alexa, quien vivía con su hermana mayor, hizo que hace tres meses, la víctima de feminicidio y su pareja se mudaran a la casa de Yessica.

Detalló que llevaban tres años y medio de relación, pero el maltrato hacia su madre no paró pese a estar en su casa, por lo que corrió al sujeto

“Siempre estaba a la defensiva con ella, siempre la atacaba verbalmente, enfrente de nosotras no la atacó físicamente, pero mi mamá sí me lo llegó a contar, que sí era agresivo con ella”, indicó.

Yessica pensó que el asunto quedaría ahí, pero Arturo no paró. El pasado 4 de mayo, el presunto feminicida roció con combustible a Myrta y le prendió fuego, hecho que ocurrió en la alcaldía Cuauhtémoc.

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“Sabemos que le vertió solvente, que la prendió, esto nos lo cuenta mi mamá, pero cada que nos lo contaba entraba en crisis y nunca se pudo determinar de principio a fin por qué empezó, cómo fue, cómo terminó, no lo sabemos”, dijo Yessica.

Aunque logró contarles lo sucedido una vez que pudo hablar; contó a su hija elsufrimiento que le hizo pasar Arturo y las amenazas de las que fue objeto.

Por las graves heridas, Myrta estuvo internada casi dos meses en el hospital Rubén Leñero, pero no pudo recuperarse y hace unos días falleció en el nosocomio. Hasta el momento, no se ha detenido a Arturo.

Feminicidios en México

Los casos que le hemos contado en esta nota se suman al ocurrido recientemente en Jalisco con Luz Raquel, quemada viva por un vecino que le molestaba el ruido que hacia el hijo de la joven, el cual tiene autismo y pese a la solicitud de ayuda al gobierno de Enrique Alfaro; así como al caso de Margarita Ceceña, quemada en el estado de Morelos y fallecida hace dos días en la Ciudad de México por las heridas infligidas por uno de sus familiares.

En los cuatro casos referidos no ha habido detenidos, tampoco se ha explicado un avance en las investigaciones que señalen que los casos no quedarán impunes. En ese contexto, la tarde de ayer la presidenta del Senado de la República, Olga Sánchez Cordero reveló que, de acuerdo con la última información disponible, los feminicidios aumentaron 137 por ciento entre 2015 y 2021; “con todo lo que el 97.7 de estos casos, muchos de ellos, el 97.7 no son denunciados”.

“Lamentablemente las autoridades federales y las estatales, ya sea en su labor de investigación, persecución o sanción de este delito de feminicidio, la verdad se han quedado muy cortas en hacer justicia”, detalló Sánchez Cordero.

La también ministra el retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación consideró que el aumento en las cifras también se debe a la forma en que actualmente se tipifica el delito de feminicidio, la cual es muy variada en las diversas entidades federativas. DJ

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