Peligrosa vacuna religiosa Vs la Covid

23 de Abril de 2024

Oscar Moha
Oscar Moha

Peligrosa vacuna religiosa Vs la Covid

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Por motivos religiosos, ecológicos, humanistas, o simplemente por llevar la contra a instituciones de Salud, las comunidades que deciden no vacunarse o aislarse de medicamentos de laboratorio para curar sus enfermedades -o prevenirlas- están aumentando en México. Ministros de Culto invocan desde sus espacios que el “anticristo está detrás de las medicinas e inyecciones”, por lo que ya “vacunan” a sus seguidores para no recibir ninguna recomendación que provenga de los galenos… y menos medicinas inyectables.

En Estados Unidos, Rumania, Inglaterra, Bélgica, Suiza, Francia, Brasil y otros países se han dado brotes importantes de sarampión, paperas, difteria, luego de que líderes espirituales de credos ortodoxos han afirmado que “Dios nos hizo perfectos a su imagen y semejanza”, por lo que el ser humano no tiene necesidad de agentes externos para su inmunización ante cualquier enfermedad, invitando a los suyos a no ser “conejillos de indias” para las farmacéuticas y los gobiernos que pretenden sólo “propagar una cultura diabólica que destruye la fe”.

Estas órdenes religiosas argumentan que la tuberculosis, poliomielitis, tétanos y otras epidemias son “creadas en laboratorios para destruir a la raza humana”. También creen que las de transmisión sexual como clamida, herpes gonorrea y SIDA, así como los diferentes tipos de cáncer “son causa de la desobediencia del hombre para con el Ser Supremo”.

En Miami, Estados Unidos, el “apóstol” Guillermo Maldonado ya comenzó a “vacunar espiritualmente” a sus feligreses contra el Coronavirus. De origen hondureño y con más de 20 mil seguidores en varios países, el dirigente del conglomerado “Ministerio Rey Jesús” difunde en sus redes sociales un video donde afirma que “la inmunidad divina es mejor… pues el COVID forma parte de una agenda satánica global”.

Maldonado ha extendido su cobertura a no pocas Iglesias Cristianas Evangélicas en México. Llena estadios y auditorios en varios estados del país recolectando “donativos” libres de impuestos por sus predicaciones. Dice estar preparando una agenda, que incluye nuestra nación, para “vacunar” a sus seguidores en contra de la inoculación que ya tiene agendada el Gobierno Federal y que el mismo canciller Marcelo Ebrard ha calificado como una “misión cumplida”.

Hay, por el contrario, otras Iglesias que preparan su agenda acorde al calendario propuesto por el Sector Salud para conminar a los creyentes para que, en la mediad en que sean vacunados contra la pandemia mundial, asistan a los servicios religiosos y evitar contagios. Es decir, a partir de febrero del 2021 las personas de 60 años o más que hayan sido inmunizados puedan congregarse en los templos sin riegos sanitarios.

La Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público en su Artículo 29 señala que “promover la realización de conductas contrarias a la salud o integridad física de los individuos” constituye una infracción que podría sancionar la Secretaría de Gobernación mediante un apercibimiento, multa de hasta 20 mil salarios mínimos vigentes, la pérdida del registro como Asociación Religiosa y hasta la clausura de sus templos.

Las Secretarías de Salud y Gobernación estar atentas para evitar que en nombre de la fe se violen leyes y garantías que afecten a la población y no sólo a grupos religiosos que seguramente reclamarán su “libertad de credo”, sin mirar el bienestar de los que no tienen ninguna preferencia religiosa, lo que representaría un riesgo sanitario más grave que permitir la apertura de la Basílica de Guadalupe este 12 de diciembre.

PALABRA DE HONOR: La Ciudad de México está en semáforo más que rojo. Aunque la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, no haya querido decretarlo oficialmente, señales como cerrar la Basílica de Guadalupe el 12 de diciembre y amenazar con multas a quien realice reuniones caseras multitudinarias durante las festividades navideñas y el envío masivo de mensajes a celulares para prevenir más contagios de COVID son medidas que sólo se tomarían ante la imposibilidad de atender a más pacientes en los hospitales.