Por décimo año consecutivo, los estadounidenses consumieron menos bebidas carbonatadas en 2014, y la compra de refrescos dietéticos se redujo aún más en relación a sus contrapartes azucaradas, de acuerdo con el reporte anual de Beverage Digest dado a conocer este jueves.
La firma que estudia el sector, encontró que el volumen total de refresco consumido se redujo 0.9% el año pasado, comparado con una reducción de 3% registrada un año antes.
Así mismo, las bebidas dietéticas cayeron respecto a los 10 refrescos más consumidos en Estados Unidos. Incluso aunque la gente compró menos Pepsi, logró desplazar del segundo lugar a Diet Coke, que sufrió un descenso más notable.
Coca Cola se mantuvo, por mucho, como la soda más popular en Estados Unidos, al venderse casi el doble que Pepsi, en el segundo sitio.