“La hegemonía de EU imposible sin operaciones encubiertas” (III)

12 de Mayo de 2024

“La hegemonía de EU imposible sin operaciones encubiertas” (III)

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McCoy hace un ejercicio de memoria al recordar que desde Harry Truman en 1947, se institucionalizó el espionaje

McCoy subraya que, desde Harry Truman, cuando se aprueba la Ley de Seguridad Nacional, en 1947, se institucionalizó el espionaje y la intervención soterrada como la columna vertebral de la política internacional de EU

JS: Quiero preguntarle cómo terminamos con el estado de seguridad nacional que tenemos hoy. Me refiero a la NSA con sus grandes poderes, que por supuesto usted documenta en el libro. La CIA emplea tácticas bajo lo que usted ha llamado “el mundo encubierto”. Hay una sensación, bajo alguien como Barack Obama, de que no vamos a enviar despliegues masivos de tropas alrededor del mundo, que reduciremos nuestra dependencia a los drones, las operaciones encubiertas, el uso de las Fuerzas de Operaciones Especiales y los paramilitares de la CIA. Pero, háblennos del crecimiento posterior a la Segunda Guerra Mundial de lo que ahora se conoce como el estado de seguridad nacional. AM: Creo que el estado de seguridad nacional es el instrumento que Estados Unidos utilizó para construir y ejercer su hegemonía global. Mirando la historia comparativa de los imperios en la edad moderna, que se remonta a 500 años, lo que distingue al imperio de EU de casi cualquier otro, es la dependencia de métodos encubiertos y es el resultado de un momento histórico. El imperio de Estados Unidos coincidió con la descolonización, la disolución de media docena de imperios europeos que produjeron 100 nuevas naciones, más de la mitad de las naciones independientes del planeta de hoy. Y así se ejercitaba la hegemonía estadunidense, no sobre las colonias, cuya soberanía estaba comprometida y de hecho había sido transferida al poder imperial, sino sobre estados independientes, que tenían soberanía. Así que tenías un imperio bajo condiciones que negaban el imperio. Entonces, ¿cómo ejercitas la hegemonía en un mundo no hegemónico? Tienes que hacerlo encubiertamente. Y en 1947, el presidente Harry Truman, justo después de la Segunda Guerra Mundial, y el Congreso aprobaron la Ley de Seguridad Nacional que establecía el aparato burocrático para el estado de seguridad nacional de Estados Unidos. Esa Ley de Seguridad Nacional creó el Departamento de Defensa, la Fuerza Aérea de Estados Unidos, la CIA y el Consejo Nacional de Seguridad, los instrumentos clave para el ejercicio de poder global de Estados Unidos. Y cuando llegó la próxima administración, bajo la dirección del presidente Dwight Eisenhower, lo que hizo fue darse cuenta de que había naciones que se estaban independizando en todo el mundo y que tenía que intervenir en esas naciones independientes y que la única manera de hacerlo era la negación plausible, intervenir de una manera que no se pudiera ver. Tenían que hacerlo encubiertamente. Y así Eisenhower miró hacia la CIA, creada por Harry Truman, y la transformó de una organización que originalmente intentó penetrar en la Cortina de Hierro, para enviar agentes dentro del mundo socialista soviético. Fue un completo desastre. Los agentes fueron capturados y usados para descubrir las redes de oposición dentro de la Unión Soviética, fue absolutamente contraproducente. Eisenhower apartó a la CIA de esa miserable misión de penetrar en la Cortina de Hierro y en su lugar le asignó la misión de penetrar y controlar las tres cuartas partes del globo que estaban en el lado norteamericano de la Cortina de Hierro, el mundo libre. Y Eisenhower se apoyó en la CIA, y luego en la Agencia de Seguridad Nacional, para vigilar las señales. Y comenzamos a ejercer nuestra hegemonía global, encubiertamente, a través de la CIA y de las agencias de inteligencia aliadas. Y ese ha sido un aspecto distintivo de la hegemonía estadunidense desde los albores del poder global estadunidense en 1945. Y eso continúa hoy, cada vez más profundamente, capa tras capa, a través de esos procesos que describiste. Los drones, la vigilancia, la guerra cibernética, todo eso está encubierto. JS: Es interesante porque hay mucha conversación sobre la interferencia extranjera en las elecciones estadunidenses, y el foco está exclusivamente en si Rusia interfirió o no en nuestras elecciones, y si es así, ¿tuvieron éxito en promover a Donald Trump sobre Hillary Clinton? Y en su libro, usted cita esta compilación de Carnegie Mellon University que dice que entre 1946 y 2000, las superpotencias rivales de Estados Unidos y la Unión Soviética, entonces Rusia, intervinieron en 117 elecciones o el 11 por ciento de todos los concursos competitivos a nivel nacional celebrados en todo el mundo a través de dinero en efectivo para financiar campañas y desinformación en los medios de comunicación. Y entonces usted escribe: “Significativamente, Estados Unidos fue responsable de 81 de esos intentos, 70 por ciento del total”. Esto no es nuevo, la idea de que las naciones interfieren en las elecciones de otras. Guíennos a través de algunos de los mayores éxitos de la CIA y otras agencias de inteligencia en la interferencia electoral, desde la década de 1940. AM: Claro, en primer lugar, ése fue uno de los instrumentos centrales del ejercicio global del poder global de forma encubierta. Estábamos promoviendo la democracia en todo el mundo, defendíamos fuertemente la democracia sobre el autoritarismo. Por otro lado, ejercíamos la hegemonía estadunidense, lo que significaba que de alguna manera aquellos concursos democráticos libres debían producir un líder que fuera afín a nosotros. Y, de hecho, uno de los aspectos clave del poder global estadunidense, ejercido por Eisenhower, encubiertamente, fue el cambio. Bajo los imperios coloniales, Gran Bretaña, Francia, Bélgica y el resto, existían oficiales de distrito, quienes trabajaban con jefes, maharajás, emires, funcionarios locales en distritos coloniales alrededor del globo. Y controlaban quien sería el nuevo emir, el nuevo sultán o el nuevo maharajá. Y entonces, cuando todas esas naciones se descolonizaron y se independizaron, el punto de apoyo para el ejercicio del poder pasó del distrito colonial al palacio presidencial. Y así Estados Unidos prestó mucha atención al control de quiénes eran los líderes en esos palacios presidenciales. Si nos fijamos en los 240 mil cables WikiLeaks que se filtraron en 2011, veremos que gran parte de lo que nos preocupa es quién está en esos palacios presidenciales. Así que Estados Unidos lo hizo a través de golpes de Estado y, durante el periodo de los años 50 a los 70, alrededor de una cuarta parte de los Estados soberanos del mundo cambiaron de gobierno por golpes de Estado, y también lo hicieron mediante manipulación electoral. Uno de los más famosos, el que realmente dejó clara la capacidad de la CIA para hacer eso, fueron las elecciones de 1948 en Italia cuando parecía que los partidos comunistas y socialistas estaban perfilados para ganar la mayoría de los escaños en el parlamento y luego formar un gobierno. Y podrías tener de nuestro lado de la Cortina de Hierro, en una potencia mundial muy importante, a Italia, un gobierno comunista electo y democráticamente elegido. Y por eso la CIA gastó un millón de dólares para lograrlo. Imagínate: Comprar Italia por un millón de dólares. Parece una ganga. Gastaron sólo un millón de dólares en manipulación electoral muy hábil y ayudaron a ganar a los Demócratas Cristianos, un gobierno centrista. Y, a lo largo de la Guerra Fría, Estados Unidos intervino hábilmente en Italia en múltiples niveles abiertamente en ayuda bilateral y diplomacia, encubiertamente, y manipulación electoral y en algo mucho más profundo, la Operación Gladio, donde tenían, si se quiere, un aparato subterráneo para tomar el poder en Italia en el caso de una toma del poder por parte de los comunistas a través de una invasión. Y la CIA intervendría, bombardeó con dinero el Partido Liberal Democrático en Japón, jugó a la política electoral en Filipinas, intervino en la política de Corea, en la política surcoreana, en todo el mundo. Cada vez que hubo una contienda electoral seria en la que el resultado era crítico para nosotros, para nuestros intereses geopolíticos, Estados Unidos intervenía. Ahora, la diferencia entre eso y lo que hemos visto con las elecciones de 2016 en Estados Unidos, si eres la hegemonía global, manipulas, influyes en las elecciones de otras personas. Si eres una potencia global como Estados Unidos, que representa la democracia, ésa es la forma en que ejerces ese poder. Lo hicimos a veces crudamente, a veces hábilmente, pero no invadimos países, no bombardeamos, etcétera. Lo hicimos así. Y cuando manipulamos las elecciones de otros, somos la potencia global. Y cuando estamos siendo manipulados, cuando otros poderes están penetrando en nuestra sociedad y manipulando nuestras elecciones, es una señal de que somos un poder en declive. Y eso es muy serio. Con el fin de mantener nuestra posición a nivel internacional, no sólo tenemos que ejercer nuestro poder hábilmente, encubiertamente, a través de las operaciones que hemos estado describiendo, la vigilancia y el resto, y abiertamente a través de la diplomacia y el liderazgo internacional, los tratados y el comercio y todo eso, sino que también tenemos que asegurarnos de que nuestro proceso electoral es impenetrable, seguro, que otros poderes no pueden manipularnos, porque van a intentarlo.

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