Los excesos del secretario
Luis Enrique Miranda se olvidó por un sábado de principio de mes que es el responsable del gobierno para combatir la pobreza
El secretario de Desarrollo Social, Luis Enrique Miranda, se olvidó por un sábado de principio de mes que es el responsable del gobierno para combatir la pobreza e hizo derroche de exactamente lo contrario, la opulencia sin recato. Sucedió en su casa de descanso en Ixtapan de la Sal, en donde su entrañable amigo y empresario querubín del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, Alfredo Miguel Afif, le organizó su fiesta de cumpleaños. Dicen los que saben que no hubo más de 150 invitados, pero que el número limitado de quienes fueron no corresponde a la forma como se desarrolló el festejo, por cuanto a dinero invertido en la fiesta a la cual asistió su compadre, el presidente, y funcionarios del más alto nivel en la administración actual.