La ONU denuncia retroceso en los derechos de mujeres y minorías
Volker Türk, de la ONU, advierte sobre el aumento de la discriminación estructural y la presión contra mujeres, minorías y políticas de inclusión
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos lanza una advertencia global sobre el retroceso en los derechos de mujeres, minorías y personas LGTB+.
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El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió este lunes sobre un preocupante retroceso en los derechos de las mujeres y de las minorías a nivel mundial, señalando que estos grupos están siendo utilizados como chivos expiatorios en contextos políticos y sociales cada vez más polarizados.
Discriminación y tensiones sociales, en aumento
Durante su intervención, Türk destacó que las tensiones sociales actuales derivan de discriminaciones estructurales que han persistido por décadas. Estas se basan en criterios como la raza, religión, sexo, orientación sexual, identidad de género, condición migratoria o casta.
“Las tensiones sociales suelen tener su origen en la discriminación sistémica y de larga data”, afirmó.
El funcionario explicó que, aunque se han implementado políticas para enfrentar estas formas de exclusión con resultados positivos en varias regiones del mundo, actualmente se registra un giro preocupante que apunta a revertir estos avances.
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Críticas a programas de diversidad y retrocesos en EU
Türk también hizo referencia a las crecientes críticas dirigidas hacia los programas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) en Estados Unidos, especialmente desde el regreso de Donald Trump a la presidencia.
Varias empresas de renombre, como Meta y McDonald’s, han reducido o eliminado estas políticas en respuesta a presiones políticas y sociales. Según Türk, esta tendencia refleja una “decisión estratégica” de algunos actores para culpar a los grupos vulnerables de problemas estructurales.
“Cuando observamos el retroceso hacia tales políticas, lo vemos por lo que es: una distorsión fundamental que revela una decisión estratégica de convertir a los grupos vulnerables en chivos expiatorios”, denunció el alto comisionado.
Racismo estructural y legado colonial
Otro punto central de su discurso fue la persistencia del racismo sistémico, al que calificó como una “plaga” heredada del colonialismo. Türk lamentó que las personas de ascendencia africana siguen enfrentando el uso desproporcionado de la fuerza, lo cual refleja un problema no resuelto en múltiples sistemas de justicia y seguridad alrededor del mundo.
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Preocupación por los derechos de las mujeres y comunidad LGTB+
El Alto Comisionado alertó también sobre el aumento de restricciones legales y discursos de odio dirigidos hacia mujeres y personas LGTB+. Mencionó que, en varios países, se han aprobado o impulsado leyes que limitan libertades y derechos básicos de estos grupos, además de un incremento en los discursos discriminatorios y actos de violencia.
“El racismo sigue siendo una plaga”, afirmó Türk, al tiempo que advirtió sobre nuevas formas de violencia y exclusión.
Llamado a la defensa de derechos humanos universales
Frente a este panorama, Türk instó a los gobiernos y actores internacionales a fortalecer las políticas que promuevan la inclusión y la equidad, y a no ceder ante narrativas que buscan culpabilizar a los sectores más vulnerables.
El discurso del Alto Comisionado refuerza el llamado de Naciones Unidas a proteger los derechos humanos como eje fundamental de la estabilidad social y la justicia global, en un contexto donde los retrocesos amenazan logros alcanzados durante décadas.
