En Palacio Nacional anotaron un home run a los ambientalistas defensores del Tren Maya y avanzaron hasta tercera base; sin embargo, la carrera no se ha completado y un juez podría regresarlo hasta el área de bateo, donde comenzaría nuevamente el encuentro.
Y es que, ante los amparos interpuestos contra la construcción en el Tramo 5 de una de las obras emblemáticas del presidente Andrés Manuel López Obrador, el gobierno federal determinó calificar el proyecto como de seguridad nacional para continuar con la construcción.
Sélvame del Tren, una de las organizaciones que se opone a esta construcción y en la que participan decenas de famosos y opositores de la llamada Cuarta Transformación, además de Greenpeace, han denunciado que este tramo es riesgoso y dañino, no sólo para el medio ambiente, sino para el ámbito antropológico.
Por eso es que interpusieron amparos contra la construcción, y en mayo de este año se les concedió una suspensión definitiva contra el Tramo 5 de la obra; sin embargo, el pasado lunes 18 de julio, el director del fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Javier May, dio a conocer que la obra se reanudaría por ser de seguridad nacional por las vías férreas.
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Este martes, el presidente López Obrador aseguró que la obra, en beneficio del pueblo, no se detendría por los intereses “de un grupo de corruptos y de seudoambientalistas” y que sería a través de un mecanismo legal se establecía el argumento de seguridad nacional.
La acción, a decir del abogado Rodolfo Barreda Alvarado, consejero de Basham, Ringe y Correa S.C., no cae en desacato, debido al término con que se sustenta la reactivación de las actividades de construcción.
Sin embargo, “¿qué es lo que muy seguramente pasará? Pues que se va a solicitar la ampliación de la suspensión que ya se había otorgado o se va a promover un incidente de violación a la suspensión”.
El abogado señaló a ejecentral que ahora se tendrá que ver si realmente tiene motivo de seguridad nacional la construcción del Tren Maya, lo que puede ser analizado por un juez, en caso de que se soliciten o promuevan las acciones que detalló.
Foto: Cuartoscuro
Pero nada parece detener a la administración lopezobradorista, que, además de decretar seguridad nacional para continuar la obra, este martes se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un acuerdo por el que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) cancela las vacaciones administrativas para continuar con las labores de construcción del proyecto.
Pero, de acuerdo con la Ley de Seguridad Nacional, existen una serie de requisitos que se deben cumplir en la materia y para obtener dicho nombramiento. Pese a eso, el comité encargado de determinar su procedencia informa al Presidente de la República sus conclusiones, por lo que López Obrador cuenta con el poder de determinar que el Tren Maya mantenga su declaración como seguridad nacional, que se entiende como un tema de invasión al país, un conflicto bélico o algo que realmente ponga en peligro a la sociedad en general, explicó Barreda Alvarado.
Las posturas en contra
Desde noviembre que se decretaron de seguridad nacional las obras prioritarias del Gobierno, y desde las primeras horas que se dio a conocer que aplicarían para continuar con este proyecto han sido diversas las posturas que se han posicionado en contra de la decisión.
#SélvameDelTren solicitó el apoyo de la comunidad para exigir la protección de nuestro futuro de forma colectiva, ante la devastación del segundo pulmón más importante de Latinoamérica y una de las reservas de agua dulce más importantes del mundo”.
Greenpeace exigió la suspensión definitiva de la obra, porque pese a las suspensiones judiciales existentes, denunció a Fonatur de continuar con las obras y violar la ley.
Foto: Cuartoscuro
El dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, acusó al Presidente de México y al Consejo de Seguridad Nacional de violar la sentencia judicial, y los señaló de autoritarios y de imponer a toda costa la construcción.
La senadora panista Xóchitl Gálvez dijo que el gobierno de López Obrador minimiza los vestigios encontrados durante la construcción del Tren Maya, por lo que presentó un punto de acuerdo para que se considera cambiar la ruta del Tramo 5 de la obra.
Y no podía faltar el expresidente Vicente Fox Quesada, quien alzó la voz y dijo que es un abuso, una destrucción de los recursos naturales. “Un tren que nos cuesta a los mexicanos del Norte, del Centro y del Sur dos ojos de la cara!! Nuestros hijos seguirán pagando la deuda”, externó en redes sociales.