Después de cruzar la meta no dejó de pedalear, aunque la intensidad con lo que lo hacía se redujo notoriamente. A lo lejos, vio a su esposa y a su hija, quien aún en brazos, ondeaba la bandera de Dinamarca. Jonas Vingegaard bajó de su bicicleta y las abrazó, hace sólo unos segundos se había convertido en el ganador del Tour de Francia.
La emoción se sentía: consiguió el primer lugar en la prueba de ciclismo más importante del mundo. Fue el primero de entre 144 ciclistas en cruzar la meta luego de un recorrido de 21 etapas y 3 mil 349.8 kilómetros.
El ciclista danés, de 25 años, conquistó este domingo la edición 109 del Tour de Francia pese a no creerse capaz de lograrlo por varios años. “Es simplemente enorme para mí, es increíble”, declaró Vingegaard en los Campos Elíseos, la principal avenida de París, luego de cruzar la meta.
Las lágrimas que derramó tras abrazar a su familia dejaban ver el esfuerzo realizado, la presión, que desde hace años antes doblaban su estómago y lo hacían vomitar.
Una persona “con un corazón de oro” es como lo describió su esposa Trine Marie Hansen en una entrevista con L’Equipe, quien reconoce su perseverancia, pese a que, en 2018, cuando se conocieron, Jonas aseguraba que sería un banquero.
Entre las altas temperaturas ocasionadas por la ola de calor que Europa atraviesa, y los contagios de Covid-19 que enviaron a su casa a varios corredores antes de tiempo, el danés logró superar sus miedos. “Teníamos un plan y lo seguimos al pie de la letra, todos mis compañeros se superaron”, agregó.
El danés consiguió arrebatarle el trono al esloveno Tadei Pogacar por cuestión de minutos, quien había permanecido con la corona por dos años seguidos y parecía ir por una tercera victoria.
De empacador de pescado a ganador del Tour de Francia
Practicó futbol, bádminton, y uno que otro deporte más, pero el ciclismo logró robarse su corazón a la edad de 10 años. Sin embargo, Jonas Vingegaard padeció mucho para conseguir dormir bien después de un torneo que le ocasionó estrés continuo y noches de desvelo.
Sus padres, Karina y Claus Vingegaard Rasmussen, hicieron hasta lo imposible para conseguir que su hijo dejara el ciclismo, pues el joven parecía sufrir con cada carrera pese a asegurar amar el deporte.
La llegada de su esposa Trine Marie Hansen, en 2018, y posteriormente el nacimiento de su pequeña Frida, en 2020, fueron dos momentos clave en su vida para motivarse y conseguir aquello que pensaba imposible.
En 2021 consiguió lograr quedar abajo de Tadei Pogacar, y este año decidió regresar por la revancha, ganando finalmente la competencia que cualquier ciclista profesional sueña con ganar.
Con información de AFP y La Nación. RM
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