Desde que comenzó a publicar las imágenes de su casi inexistente panza de embarazada, la modelo de 30 años ganó tantos seguidores como críticos. Unos la admiran por su increíble figura, pero otros la acusan de poner en riesgo al bebé por no alimentarse los suficientemente bien y hacer ejercicios demasiado exigentes.
Sin embargo, a Sarah Stage parece no importarle, por lo que continúa subiendo selfies en ropa interior a su cuenta de Instagram, cuando sólo faltan diez días para el nacimiento de su primer hijo.
En algunas de ellas, se muestra con amigas también embarazadas, aunque con un cuerpo más acorde a las circunstancias.
Algunos comentarios permiten ilustrar el revuelo que se generó en torno a su figura. Por ejemplo, una de sus defensoras comentó: “Me siento completamente inspirada para ir al gimnasio mañana mismo. Te ves absolutamente hermosa”.
Cansada de las críticas, Stage publicó un comentario con el que pretendió cerrar las discusiones. “Si no les gustan mis fotos dejen de seguirme. Yo estoy emocionada y feliz, disfrutando cada segundo de mi embarazo. ¡No puedo esperar para conocer a James!”