En los primeros nueve meses de este año, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador registra un promedio mensual de 22 agresiones contra las Fuerzas Federales. Lo cual significa un 30% más de ataques contra las fuerzas del orden de las registradas en los primeros dos años del gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, cuando entre 2007 y 2008 se suscitaron un total de 157 embates.
Durante la conferencia matutina de este lunes en la que el gabinete de seguridad dio a conocer un informe sobre el estado de seguridad del país, se dio cuenta que de enero al 30 de septiembre de este año el índice de letalidad se ubica en un -88 por ciento, al tomar como base un total de 123 agresores fallecidos, registrados en 204 choques armados con las fuerzas de seguridad federales, menos 34 agresores que resultaron heridos y 177 más que fueron detenidos en ese periodo.
Con base en la tabla presentada en la conferencia mañanera el punto más crítico en cuanto a la medición de dicho índice de letalidad se tuvo entre los años 2011, 2012, 2013, siendo el año de la transición entre el gobierno de Felipe Calderón y de Enrique Peña Nieto el que registró el mayor incremento en letalidad por parte de las fuerzas de seguridad con un promedio de 424, al sumar un total de 822 agresiones en todo 2012, de las cuales 91 elementos de seguridad resultaron fallecidos, 398 heridos; y por parte de los agresores se contabilizaron mil 047 abatidos, 71 más que resultaron herido y 552 quienes fueron detenidos.
Al hacer referencia de “un punto de inflexión”, señalando lo registrado de enero a septiembre de este año con 123 agresores fallecidos, 34 heridos y 177 detenidos, el general secretario Luis Cresencio Sandoval, titular de la Defensa Nacional, apuntó que la cantidad de fallecidos empieza a reducirse, y en contraparte los detenidos a incrementarse.
“Estas son parte de las tareas o a lo que nos enfrentamos las Fuerzas Armadas en las tareas que desarrollamos. Aquí también es importante señalar: hay 148 mil 392 fallecidos vinculados a delincuencia organizada, es decir, en enfrentamientos entre ellos, en el pago de alguna situación que no cumplieron la pagan con la muerte o situaciones que se vinculan entre organizaciones criminales”.
De esa cantidad, refirió el titular de la SEDENA, hay cinco mil 370 fallecidos que han sido como resultado de las agresiones contra las autoridades federales,” ese es el número reducido fallecidos sobre esto, considerando que hay cinco mil agresiones desde el 2006 a la fecha”, reiteró.
De acuerdo con los números citados por el general Cresencio Sandoval, la cantidad de agresores fallecidos, ya sea a causa de conflictos entre ellos o por agresiones a las fuerzas federales, fue incrementándose gradualmente a partir de 2009, al sumar 228; para 2010 el aumento se dio en 818 agresores muertos, y para los años 2011 y 2012 se registraron los mayores incrementos con mil 412 y mil 047 agresores fallecidos respectivamente, para después bajar a 518 en 2013 y de ahí una tendencia a la baja. En esos años (entre 2010 y 2012) sumaron más de 2 mil 500 agresiones contra las fuerzas de seguridad y el crimen organizado, lo cual refleja el punto más álgido de la llamada guerra contra el narcotráfico.
“No se puede -lo he dicho muchas veces, y lo repito- apagar el fuego con el fuego, no se puede enfrentar la violencia con la violencia, no se puede enfrentar al mal con el mal; al mal hay que enfrentarlo haciendo el bien. Por eso esa es la nueva estrategia”, subrayó el presidente López Obrador al referirse a que en el cambio de paradigma de seguridad ya no actúa con el mismo nivel de letalidad que en gobiernos anteriores.
De los 152 mil 120 homicidios vinculados a la delincuencia organizada, refirió el secretario de la Defensa Nacional, 5 mil 396 han sido por enfrentamientos con Fuerzas Federales; de 2006 a 2018 hay una mayor proporción de fallecidos en relación con el número de detenidos, mientras que de diciembre del año pasado a septiembre de este año hay un mayor número de detenidos que de fallecidos.
ES DE INTERÉS
Homicidios se estabilizaron, pero no disminuyen
En seguridad… “nada qué presumir”