UNAM expulsa a siete estudiantes por toma de instalaciones en CU
La toma de instalaciones en CU, por la que fueron expulsados 7 estudiantes, duró más de 2 meses, causando daños graves al patrimonio universitario
Siete alumnas y alumnos que participaron en la ocupación ilegal de instalaciones ubicadas en la Ciudad Universitaria de la La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), fueron expulsados.
Dicha ocupación ilegal de instalaciones se suscitó del 22 de mayo al 25 de julio de este año, “causando daños graves al patrimonio universitario, como la vandalización y destrucción de los inmuebles y del mobiliario, además de la sustracción de múltiples documentos”, indicó la UNAM.
“Las y los siete estudiantes expulsados –cuya identidad se protege para no afectar los procedimientos legales— estaban adscritos a las facultades de Filosofía y Letras (2); de Ciencias Políticas y Sociales (2); de Estudios Superiores Iztacala; de Estudios Superiores Aragón, así como de la Escuela Nacional de Trabajo Social”.
La máxima casa de estudios indicó que los ahora exalumnos fueron debidamente notificados por las oficinas jurídicas de la Universidad, y los expedientes, con las pruebas existentes, fueron turnados al Tribunal Universitario para el desahogo de los procedimientos disciplinarios conforme a la legislación universitaria y con el debido respeto a sus derechos constitucionales.
. @UNAM_MX, @IPN_MX y #Colbach se unen para crear un grupo interinstitucional que combatirá la violencia porril en sus planteles https://t.co/61MMjTrHGD
— EjeCentral (@EjeCentral) June 16, 2024
¿Cómo fue la toma de instalaciones?
La UNAM recordó que el 22 de mayo de este año, las personas en cuestión ingresaron de manera violenta a la Dirección General del Colegio de Ciencias y Humanidades, donde desalojaron al personal que ahí laboraba, ocupando ilegalmente esas oficinas.
Durante los dos meses que permanecieron en el lugar, los ocupantes aprovecharon las noches para apoderarse también de espacios contiguos, como la Dirección General de Presupuesto y la sede de los Consejos Académicos de Área, indicó la UNAM.
El vandalismo en las instalaciones ocupadas fue generalizado, causando graves daños como pintas, boquetes en muros, puertas y ventanas destruidas, y la sustracción de documentos oficiales, acusó la Universidad.
Finalmente condenó estas acciones, por violentan la labor académica, y afectar el patrimonio confiado a la institución por la sociedad mexicana.
LEO