La alta cifra de asesinatos y crímenes violentos, terrorismo político, corrupción, intolerancia religiosa, discriminación hacia los migrantes, la falta de acceso a la información y libertad de prensa son los grilletes que mantienen a México rezagado en el lugar 48 de 128 países del Índice de Progreso Social 2017.
Tras analizar 50 indicadores, el gobierno mexicano obtuvo una calificación de 71.93 de un puntaje de 100, en donde los rubros de seguridad personal, acceso a la información y comunicaciones, y la libertad personal y la elección fueron los peor calificados.