El próximo domingo inicia la ronda electoral de este año con los comicios en Colima. A pesar de que podía haberse esperado un triunfo del PAN después de la anulación de los resultados anteriores, hoy las cosas no son tan claras. Jorge Luis Preciado ha sido objeto de una campaña negativa a la que no ha sabido dar respuesta y que lo despoja de la imagen de un personaje con una trayectoria basada en el esfuerzo e incluso mina fuertemente su carisma. Por otro lado, la artillería entre PAN y PRI ha hecho que el candidato de MC, “Locho” Morán, muestre un crecimiento importante en las encuestas, modificando el formato de competencia PRI-PAN que siempre se ha observado en la entidad. Sin duda lo que suceda en Colima será clave para la tónica que seguirán las campañas en el resto de los estados así como para el ánimo de los partidos políticos.
Ahora bien, dentro las 12 contiendas que se llevarán a cabo en junio, existen conformaciones partidistas muy distintas. Seis estados exhiben competencia bipartidista, PRI-PAN: Chihuahua, Durango, Aguascalientes, Tamaulipas, Puebla e Hidalgo (aunque éste también puede considerarse hegemonía priista). El PAN tiene posibilidades de triunfar en Aguascalientes, si no permite que la pugna interna entre Toño Martín del Campo y Martín Orozco desfonde al partido en la entidad. Asimismo, José Rosas Aispuro se perfila bien en Durango, aunque el Gobernador se encuentra muy bien evaluado y es de las pocas entidades en donde la aprobación de Peña Nieto se encuentra en positivos. Por último, la candidatura de Francisco García Cabeza de Vaca en Tamaulipas luce promisoria aunque el PRI cuenta con tres candidatos muy fuertes.
Otras tres entidades nos muestran un juego de tres – PRI, PAN-PRD y Morena, sin espacio para independientes: Zacatecas, Oaxaca y Quintana Roo. En la primera, David Monreal cuenta con un potencial de crecimiento importante y la fragmentación en la capital y en Guadalupe bien pueden abonar al crecimiento de Morena, que además ya tiene ganado Fresnillo. En Quintana Roo se observa un fuerte ánimo de cambio en las encuestas aunque “Chanito” Toledo, del tricolor, goza de muy buena imagen. Por último, en Oaxaca, la mala gestión de Gabino Cué puede perjudicar fuertemente al candidato de la alianza PAN-PRD, mientras que Eviel Pérez Magaña del PRI y Salvador Jara de Morena pueden beneficiarse de esto.
Existe otro grupo de entidades con formatos de competencia complejos, algunas incluyen candidatos independientes, otras más bien una presencia fuerte de partidos antisistema. En primer lugar, está Veracruz, que tradicionalmente exhibía una competencia PRI-PAN, pero que actualmente ha visto crecer la presencia de Morena y de un candidato independiente – Gerardo Buganza. Si bien la escisión de Juan Bueno Torio del PAN puede perjudicar a este partido jalando votos hacia el resto de los partidos, es difícil que éste candidato alcance las firmas necesarias para consolidar su candidatura. En esta entidad, el pleito PAN-PRI beneficia al resto de los candidatos, por lo que podemos anticipar algunas sorpresas en los comicios.
En Sinaloa, el pleito exacerbado entre el empresario Jesús Vizcarra y el Gobernador, ha generado conflictos fuertes dentro del tricolor. La alianza PAN-PRD también parece titubeante ante la selección de su candidato ya que se ve amenazado por la potencial candidatura independiente de Clouthier Carrillo que, de no postularse, abre la alternativa independiente a Heriberto Félix. En este estado el PRI está muy fuerte pero el sentimiento antisistema es ha crecido significativamente por lo que la selección de candidatos es particularmente decisoria.
Por último, Tlaxcala parecía una entidad con grandes potenciales para la alianza PAN-PRD, pero la negativa de la panista Adriana Dávila a ceder su candidatura puede costarle este posible triunfo a su partido. En esta entidad observamos una izquierda polarizada que puede beneficiar a la perredista Lorena Cuéllar. Pero también es posible que la fragmentación dentro de la oposición genere una ventaja para el priista Marco Antonio Mena, que es a lo que el tricolor apuesta.
Así, Morena tiene posibilidades en al menos dos entidades; los independientes pueden crecer en las entidades de Sinaloa y Veracruz; la alianza PAN-PRD luce fuerte en tres entidades; y el tricolor – que gobierna diez de las entidades en disputa – puede conservar al menos cuatro de ellas y ganar al menos una que no gobierne. Cabe notar que los gobiernos producto de la alianza PAN-PRD que ahora enfrentan escrutinio no parecen haber brindado los resultados prometidos.
Por motivos de movimientos laborales, éste será mi último texto en Eje Central. Agradezco profundamente la oportunidad brindada por Raymundo Riva¨Palacio de tener este espacio de opinión, así como el apoyo del equipo editorial de Eje Central. También agradezco efusivamente a aquellas personas que leyeron, compartieron y comentaron mis textos. Ha sido un honor.
@lorena_becerra