El indicador de inicio de las construcciones de vivienda tuvo una fuerte contracción durante el quinto mes de un 14.4% frente a las cifras de abril, solo comparable con los momentos del inicio de la pandemia cuando tuvo caídas en marzo y abril de más de 20 por ciento. Jerome Powell, presidente de la Fed, había adelantado en una rueda de prensa que existe un debilitamiento en la construcción de viviendas, sin embargo, el dato que reveló el Buró de Censos mostró un declive más pronunciado de lo esperado.
“El crecimiento de la inversión fija empresarial parece estar desacelerándose, y la actividad en el sector de la vivienda parece estar debilitándose”, señaló Powell ante medios tras salir de la junta de política monetaria.
El indicador se considera uno de los pilares de la economía de Estados Unidos, además de que es una señal de cómo está el gasto de las familias en la formación de su patrimonio. Según la dependencia gubernamental, la cifra fue de un millón 549 mil inicios de viviendas nuevas, una caída desde el millón 810 mil que se dieron en abril. Los economistas habían pronosticado una caída de 100 mil en el quinto mes, pero se extendió a 261 mil menos, revelando un deterioro en la confianza de los consumidores. Otro dato que confirma el debilitamiento es el número de permisos de construcción para nuevos proyectos de vivienda que tuvo su segunda baja consecutiva y mayor a lo esperado por las encuestas. Según el Buró de Censos, el número fue de un 7% menos, superando a la caída de abril de 3 por ciento.
Piden más ayuda por desempleo
Otro dato que se conoció y que muestra debilidad en la economía estadounidense fue el de las nuevas peticiones semanales de ayuda por desempleo, que fueron mayores a lo esperado por el mercado por segunda semana seguida, lo que revela un problema entre empresas y desempleados.
De acuerdo con datos del Buró de Estadística Laborales, las empresas en Estados Unidos están teniendo problemas para atraer trabajadores a sus líneas de producción, mientras que ciudadanos estadounidenses se rehúsan a tomar los empleos y prefieren las ayudas gubernamentales, aunque esto podría cambiar de acuerdo con las recientes previsiones de la Reserva Federal que ven un mayor desempleo para cerrar el año en 3.7%, el cual se incrementará a 3.9% para el siguiente año, y a 4.1% en 2024.
En esta semana se realizaron 229 mil peticiones de ayuda por desempleo, cuando lo estimado eran de 14 mil menos; también se revisó el dato de la semana anterior de 229 mil, se ajustó a 232 mil.