El monismo trumpeano

6 de Mayo de 2025

Juan Antonio Le Clercq
Juan Antonio Le Clercq

El monismo trumpeano

Juan Antonio Le Clercq

Donald Trump ha declarado la guerra a los medios de comunicación que le son incómodos. En un acto inédito, su equipo de comunicación negó el acceso a un resumen semanal a los representantes de CNN, New York Times, LA Times, BBC, Politico y Daily Mail. En solidaridad la revista Time y la agencia Asocciated Press decidieron no asistir a la rueda de prensa.

Un día después, el Presidente Trump anunció que no atendería la cena de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca, deseándoles a todos que tuvieran una gran velada. La intención de cerrar cualquier contacto directo y marcar distancia con la prensa crítica es clara. En forma paralela su estrategia de posicionamiento incrementa los encuentros con sus simpatizantes y las entrevistas con medios afines como Fox News o Breitbard News.

La incontinente actividad tuitera de Trump ilustra como pocoas cosas que su estrategia de comunicación pasa por destruir la credibilidad de los medios críticos. El 25 de febrero pasado envío un tuit más propio de una autocracia que de un régimen democrático: “Los medios de las noticias falsas conscientemente no dicen la verdad. Un gran peligro para nuestro país. El deteriorado @nytimes se ha convertido en una broma. También @CNN. Triste!”.

Veamos las implicaciones. El Jefe de Estado califica a medios de comunicación como “medios de noticias falsas” y los acusa de transmitir noticias falsas en forma deliberada. En segundo lugar, se coloca a sí mismo como la voz autorizada para determinar qué información que es falsa o verdadera.

En tercer lugar, advierte que los medios de comunicación que identifica como mentirosos, representan un peligro para el país, lo que no es otra cosa sino una amenaza cuyas consecuencias todavía no son claras. Desde su investidura presidencial, insulta directamente a dos medios de comunicación. Hugo Chávez debe estar revolcándose de risa en su tumba ante la forma en que el gobierno de Estados Unidos adoptó sin escrúpulos su política de comunicación. Al hablar del monismo metodológico, Isaiah Berlin decía que esta forma de pensamiento tiene tres características:

1. Asume que a cada pregunta que hacemos sobre el mundo sólo tiene una respuesta verdadera.

2. En tanto, sólo hay una respuesta verdadera a cada pregunta y sólo hay una forma de pensamiento capaz de develar la verdad.

3.Todas las respuestas deben formar un todo armónico de verdades coherentes entre sí.

En el plano político esta es la sopa intelectual del totalitarismo y la autocracia: sólo debe haber una opción válida y un modelo político legítimo, todos los otros necesariamente están equivocados o representan proyectos corruptos que traicionan la visión del líder supremo y la voluntad del pueblo. La persecución a los medios en el primer mes de vida del gobierno de Trump son señales de que el monismo metodológico está en el corazón de su programa de gobierno.

Los medios críticos estorban porque transmiten hechos y no la propaganda o “hechos alternativos” del gobierno. Los medios críticos se convierten en un peligro simplemente porque cuestionan su programa. En esta lógica sólo puede haber una verdad, aun cuando sea mentira, la que decida transmitir el líder de acuerdo a sus necesidades. La guerra que ha declarado Trump a los medios de comunicación es una batalla por la democracia misma y las libertades que la sustentan. Habrá que ver si la clase política tradicional, pasmada desde noviembre pasado, asume su responsabilidad en la defensa de contrapesos institucional y derechos individuales.

No podemos dormirnos en nuestros laureles, México no está exento del ataque a la libertad de expresión y de prensa en los Estados Unidos. El asesinato de periodistas es una vergüenza que ocurre con total impunidad en nuestro país.

De igual forma, algunos de nuestros líderes políticos se han dado el lujo de afirmar que los periódicos sirven para matar moscas o lavar camionetas o bien que la baja popularidad es culpa de las redes sociales.

Trumpismos puros que reflejan un desprecio profundo por el ejercicio crítico de la libertad de prensa y una preferencia por la difusión de hechos alternativos. Profesor de Relaciones Internacionales y Ciencia Política, UDLAP.