Investigadores de la Universidad de Barcelona identificaron por primera vez a la proteína ACBP como un factor que reprime la actividad de la grasa marrón, un tejido clave en la quema de calorías
En teoría, se podría detectar a los pacientes con riesgo de desarrollar una forma severa de la enfermedad haciendo test sobre el nivel de calprotectina en su sangre
Estudios recientes confirman que es cierto que el músculo es sensible a la ingesta de proteínas tras un entrenamiento de fuerza, pero que la ventana anabólica no es tan estrecha como se pensaba