Las cosas no marchan bien hacia el interior del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto. Lo último que dicen los que saben, es la molestia del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, contra el subsecretario de Comunicaciones y Transportes, Raúl Murrieta, por donde pasan buena parte de las licitaciones de obra pública federal. La razón de la molestia, agregan los que conocen del tema, es porque la parte que más ha impactado en el exterior y afecta las inversiones, tiene que ver con la asignación de contratos, derivados de licitaciones. El problema, es que o los mexiquenses se convirtieron en el último año en los empresarios más sagaces y profesionales de todos, o hay actos de nepotismo en la asignación de contratos, porque siempre caen las licitaciones en su cancha.
13 de Mayo de 2024