Signos, cifras e imponderables...

13 de Mayo de 2024

Ricardo Eguia

Signos, cifras e imponderables...

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No sale el país de los porrazos de una crisis, cuando ya se le impuso la siguiente igual o más crispante y más gravosa que las anteriores...

Como el castigo del Sísifo mitológico condenado a subir una pesada roca por la ladera inclinada de una montaña pero al llegar a la cumbre la roca rodaba hasta abajo para empezar de nuevo una y otra vez...así a este país, por angas o por mangas, aduciendo causas de dentro o desde afuera de manera inmerecida y sistemática se le sacrifica ruinosamente con las mismas crisis económicas porfiadamente maquinadas...

Porfiado tropezar empedernido, de la aurora al ocaso, del alba a la oscuridad...repetido el mismo ritual de las crisis de 1988, 1994, 2008 y la que viene donde se cambia solo la narrativa.

Sigue pandeado el país por la deuda “Fobaproa”, ese fraude monumental de los banqueros que luego en juerga asfixiante convirtieron en “deuda pública impagable"; seguidamente los 12 años de panismo saqueador: Primero la rapiña con Fox, ese dicharachero y rústico rufián que se ufanó de haber ganado la presidencia dos veces, la segunda para imponer a Calderón y dar cabida a otro calamitoso, sanguinario y brutal sexenio.

En ese desmañado regreso a lo mismo, de nuevo se empieza a encapotar el cielo de México con densos y negros nubarrones que presagian las mismas tormentas económicas que solo arrasan, estrangulan a millones de pobres, a una clase media en proceso de extinción, dejando como siempre más fortalecidos y por malas artes a los más ricos, a las castas, a las élites parásitas, inescrupulosas y voraces que hacen de cada crisis otra bacanal.

¿Y porque ese horizonte de crisis reeditada en proceso? Dicen los expertos que en primer lugar es porque México sigue ubicado entre los países más violentos del mundo o dicho eufemísticamente “entre los países menos pacíficos”, donde Siria ocupa el último lugar de 162, Irak en el lugar 159 y México no tan lejos en el sitio 138, destacando ese estudio de "índice global de paz” que los principales factores que influyen en ese entorno de violencia en México es la corrupción oficial; el tráfico de narcóticos, de armas; la pobreza de 60 millones; la extrema desigualdad; la prevalencia de los poderes fácticos y una partidocracia antidemocrática e Instituciones de procuración e impartición de Justicia débiles, cooptadas e ineficientes lo cual deriva en injusticias, abusos y excesos de la autoridad que hacen recrudecer la violencia...

Tolerante leo los titulares de los periódicos, escucho los discursos que alientan la esperanza, estoy contento, soy institucional y abrigo esperanzas...

Luego reflexiono y me pregunto ¿todo está bien, las reformas recientes van a fructificar en bien del país y estarán a la altura de los enormes retos?

Al volver y ver a mi alrededor percibo enojo, incredulidad, hartazgo, reclamos, críticas, desconfianza y un ánimo colectivo por liberarse, decir la verdad, ninguna reforma les merece consideración, ni les trae esperanza, menos certidumbre...

Y me lo explico: Ha sido brutal el costo económico y social de más de treinta años de políticas públicas del recetario neoliberal...

De inmediato cubren todo el espectro cerebral y unas cifras adquieren aplastante oscuridad donde no cabe ni un solo rayo de sol más...esas cifras son: $70.10 pesos; $17.00 pesos y 46.9% del PIB...La primera como todos lo saben es el tope del salario mínimo “homologado para todo el país” como anuncio en luces de neón “vengan, este es un país homologado para la maquila"; la segunda cifra es la de los devaluados pesos a pagar por cada dólar y contando; la última, entre otras igual de preocupantes, corresponde al porcentaje del PIB que ya alcanza la enorme deuda pública...

Luego para alimentar el optimismo leo a la displicente, árida y casi inerte Sra. Lagarde del “FMI” que receta más riesgos por “un crecimiento global desigual y decepcionante” pronosticando a los países exportadores de materias primas llamadas “emergentes” como el nuestro, que ella prevé están condenados a “un frenazo brusco y con sobresaltos” advirtiendo las graves consecuencias que tendremos además cuando la “FED” de los EE.UU., suba las tasas de interés encareciendo el dinero, las condiciones de los créditos y afectando gravemente el “costo del servicio de la deuda”...

Por su lado el “Banco Mundial” sostiene que la pobreza no solo ha disminuido, sino que ha aumentado en México...CAM-UNAM-CONEVAL en coincidencia al decir que México es una enorme y bien aceitada fábrica de pobres y de 1984 al 2014 los pobres ascienden a 63 millones y un millón más cada año.

Volviendo a las cifras negras arriba citadas no hay nada que festinar en materia de salarios mínimosya que en 33 años de neoliberalismo el aumento nominal promedio fue cercano al 20,000% y en ese lapso la inflación rebasó el 60,000% lo que implica una espeluznante pérdida real de tal suerte que solo para mitigar la inflación el salario mínimo tendría que ser de $191 pesos (5,730 pesos mensuales) casi los míticos $6,000 pesos que el sarcástico y cínico Cordero azul consideraba suficientes para una clase media pujante, con auto y escuelas privadas para los hijos...

A la precarización de los salarios los voceros de la encumbrada clase empresarial y engolando la vozmanifiestan con descaro “que esa mano de obra (mal pagada) hace al país más competitivo” y que además ayudará a levantar del suelo al desfondado mercado interno. ¿La burla como objeto de culto?

Respecto de la persistencia de la devaluación del peso a pesar de que “Banxico” remata miles de millones de dólares de las reservas en favor de los bancos que los revenden con un enorme diferencial(un negociazo diario de Mr. Catarrito y sus secuaces) tampoco Banxico tiene de que ufanarse con la “baja inflación” ya que esas cifras bajas que pregona no provienen de la política monetaria, menos de la firmeza monetaria tiene que ver con: Insuficiencia del gasto de inversión, bajos salarios y escaso poder de compra.- pero el crecimiento de los precios continua y la inflación real (INPC) se esconde en sesgos estadísticos, lenguaje confuso, adjetivos y eufemismos para llenar un falso tarro de miel.- En este tenor las amas de casa que si saben de precios amenazan diciendo o me das más para el gasto o que reduzcan el mes.-

Y respecto de la última cifra asaz preocupante del 46.9% del PIB y creciendo la deuda pública que ya equivale a 8 billones 472 mil millones de pesos (el mismo FMI habla de una tendencia al 51% para el 2017) es obvio que se gesta un problema mayúsculo no solo por la deuda per-se, sino por el enorme servicio (pago de más dólares de intereses) y sobre todo su mal uso ya que no se destinó a inversión productiva, sino a simple “gasto corriente” inútil.

Ahora bien prefiero el vaso medio lleno al medio vacio...me gusta ser optimista, pero sin levitar...prefiero pisar firme en la realidad...

Dependencia total de los EE.UU. que aún hoy y desde el 2008 no se repone su economía, los empleos son de baja calidad, es baja la demanda y el crecimiento económico modesto...el problema es que a nuestros economistas se les llena la boca diciendo “esa es la locomotora que nos va a arrastrar”... ¿a dónde?

Hugo Stigliztz, Nobel economista de los EE.UU. precisamente enfatiza: No son importantes la globalización ni las tecnologías, mientras no cambien las políticas fracasadas para redistribuir mejor la riqueza y acceder a una sociedad más igualitaria que no siga empobreciendo más a los ya pobres, acabando literalmente con la clase media y ahonde el desastre del desempleo juvenil que terminará por destruir el tejido social por el simple mantenimiento de las variables macroeconómicas, la concentración de la riqueza en una minoría acudiendo a los recortes y a la austeridad recurrentes que son prueba de una política económica fracasada y repetición de monumentales disparates.”

Pero volviendo al México nuestro, lo impensable se convierte en rutina...Ni crecimiento económico, ni empleos de calidad, ni igualdad, ni bienestar....solo saqueos incuantificables de recursos naturales, riqueza y de activos productivos.

Asi mismo se avanza en el proceso de confiscación de hidrocarburos y recursos hídricos en favor de empresas privadas y de trasnacionales pero la economía no crece ni con la flexibilización de las licitaciones petroleras que implican más ganancias al capital privado y menos ingresos reales a las finanzas públicas.

Pocos degluten la cábala celestial de que al licitarse en favor de los privados campos maduros, con reservas probadas descubiertas con gran costo por “Pemex” algún día le paguen esas inversiones realizadas con recursos públicos y menos cree nadie que esas empresas privadas favorecidas le representen un beneficio (de retorno) a este país empobrecido.

Para atraer inversiones privadas escuálidas (no rebasan en todas las rondas los $7,000 millones de dólares y solo las remesas de los mexicanos expulsados ingresan $20,000 millones de dólares, más que las exportaciones petroleras y el turismo) se hunde a “Pemex” imponiéndole recortes, se le sigue saqueando vía fiscal, se le endeuda y todavía se burlan por no “salir a competir” amarrado de pies y manos.

No entiendo insisto, ese recalcitrante odio por la ex-paraestatal a la que se le ha saqueado por décadas vía fiscal y ha sostenido la tercera parte del gasto público federal sexenio tras sexenio.

Pero se agotó el espacio y como éste tema da para mucho más, en sucesivas colaboraciones seguiré analizando sumarizadamente los signos, las cifras y los imponderables de la precaria economía mexicana.- www.ejecentral.com email: eguia.associates@gmail.com twiter: @ REguiaV

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