Se acaba de publicar información de CEPAL sobre la inversión extranjera directa, la misma decrece 12 mil millones de dólares, respecto al año pasado, pero en México estamos por arriba del mismo año del sexenio anterior, aunque se mantiene la tendencia de la inversión de mexicanos en el exterior.
Estamos en relación a la Inversión Extranjera Directa (IED) mejor que en la administración pasada, como acaba de informar la Secretaría de Economía, con un dato interesante: hoy la información oficial es más oportuna, desagregada y precisa que en el pasado. Un punto importante para la transparencia.
Dadas mis vocaciones, advierto que la misma se concentra en alrededor de tres quintas partes en 10 estados de la República, siendo la CDMX la entidad federativa que aun concentra la quinta parte de lo misma, aunque lejos del 34 por ciento que recibió en 2001 y del 30 por ciento de 2009, año de la última crisis estructural que empezó como financiera e importada y paso de fiscal para los tres órdenes de gobierno. A la Ciudad, le siguen Nuevo León con el 10 por ciento, Chihuahua, Jalisco, EDOMEX con alrededor del 7 por ciento. Baja California, 5.4 por ciento, Coahuila, Guanajuato, Tamaulipas y Puebla andan por el 4 por ciento en 2016, esto es tres quintas partes de la IED recibida por los estados. Al final, van en cola con menos del 1 por ciento, alrededor de 14 estados.
Una más de la estructura nacional de la desigualdad, se suma a la deuda pública municipal y a la concentración de participaciones en ingresos federales.
¿Porque pasa eso?, infraestructura insuficiente, política de formación de recursos humanos desconectada de las necesidades de desarrollo de las regiones y una inversión en infraestructura con muchas décadas de rezago, como ha demostrado el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado. Asimismo, el agotamiento del Pacto Fiscal que viene de los ochenta, la concentración de poder tributario y la debilidad de nuestra política económica para resistir los embates del exterior. Lo anterior coincide con el informe anual que publica la CEPAL, con información de la IED en América Latina. Brasil tuvo 78 929 millones de dólares de inversión extranjera el año pasado, México 32 113 millones, un poco menos de la mitad del País más grande de América Latina. Según cifras de CEPAL, en el periodo 2005-2009, Brasil tuvo 32 331 millones de dólares, mientras México, 26 276 millones. Poca diferencia. En 2011 Brasil recibió 101 156 millones de dólares de IED, mientras nosotros 23 792 millones, menos de la cuarta parte. Esto fue a la mitad del Gobierno de Calderón. En 2013 los brasileños recibieron 1750 millones de dólares de inversión extranjera, mientras México 46 597 millones, parecería que las distancias se acortaban, lo que pasa es que ese año se registró como IED la venta de la segunda cervecera más importante del país.
Por otra parte, la IED en 2016, fue inferior a la de 2013, pero superior en casi el doble a la de 2012, ultimo año del presidente Calderón, además efectivamente la cifra de 2016 es casi un 50 por ciento superior a la de 2010 que fue como de 21 mil millones de pesos.
Pero lo real es que millones más o menos, Brasil sigue en estas cifras muy por encima de la recibida en México. Lo real es que las cifras en el actual gobierno es superior a las del gobierno anterior, pero seguimos como señala CEPAL por debajo de las cifras de Brasil, a pesar de las crisis política, social y económica de ese País, el del sistema federal más grande de América Latina, no nos olvidemos que somos pocos países que nos decimos federalistas.
En 2012 Chile nos superó con más de 30 mil millones, mientras nosotros apenas llegamos a 17 mil millones, y Brasil 86 607 millones. Ya en el actual gobierno de México, recibimos mas flujos de inversión extranjera que los chilenos, lo que sigue hasta el día de hoy.
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