Jonathan Nácar
“Es natural y es verde, ¿Qué tiene de malo?”, es el tipo de ideas que por lo menos en el último año se han difundido con mayor frecuencia entre jóvenes y población en general sobre el consumo de la mariguana, lo que en consecuencia ha disminuido “claramente” la percepción de riesgo de la droga, advirtió María del Rosario Tapia Medina, directora del Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones en la Ciudad de México (IAPA).
“Caminamos por la ciudad y ahora es más frecuente que llegue el olor a mariguana en cualquier lugar, en las casas, los parques. Se hace de manera más libre, más abierta porque hay una percepción de que se está legalizando y que no hay problema, pero hasta este momento la mariguana no está legalizada, ni su distribución, ni su tránsito, ni su producción o consumo en la vía pública, lo que está bajo resguardo es el derecho al consumo individual y la portación de cinco gramos”, señaló la exdiputada.
En conferencia de prensa, Tapia Medina reconoció que a raíz de que se abrió el debate sobre la legalización de la “cannabis” y se manejaron ampliamente diversas posiciones en el sentido de que es menos dañina y adictiva que otras drogas, o que puede tener propiedades medicinales, el resultado ha sido una justificación para que las personas, y los jóvenes en general, la consuman.
“La baja de percepción va a generar aumento del consumo, estaríamos pensando que en la próxima encuesta de adicciones de estudiantes se refleje un aumento del consumo de mariguana”, dijo.
Por esa razón, la titular del IAPA anunció que durante este 2017, el organismo se enfocará al problema de la adicción a la mariguana y reforzará su campaña de prevención y atención con la difusión de materiales gráficos y audiovisuales, así como la continuidad de programas de atención, y actividades recreativas para contrarrestar esa baja percepción.
Independientemente del debate y definición que se dé en el Congreso, sobre la minuta, para que “los jóvenes no bajen la guardia”.
Tras presentar una serie de videos y spots que integran la campaña, Tapia señaló que entre las metas para este año también está el conformar un modelo integral de atención a las adicciones en todos los reclusorios de la ciudad, con la finalidad de prevenir una detección temprana, que se pueda replicar en el sistema penitenciario del país.
A la fecha, indicó, todos los centros de reclusión de la Ciudad de México cuentan con clínicas de atención, 350 técnicos penitenciarios, médicos y psicólogos capacitados, y complementariamente 1,600 custodios y personal administrativo del sistema penitenciario capitalino asesorados en el tema de consumo y adicción.
Señaló que actualmente hay 20 Centros de Atención Integral de Adicciones pendientes de revisión.
La funcionaria sostuvo que están operando 160 centros con registro del IAPA, y 48 de ellos cuentan con reconocimiento de la Comisión Nacional Contra las Adicciones (CONADIC), los cuales atienden en promedio a unas dos mil 500 personas con problemas de adicción.