Pese a que se el PIB presentó un incremento del 12.1 por ciento en el tercer trimestre del año, el Banco de México indicó que persisten riesgo frente a la trayectoria y vigor que la recuperación puede mostrar en los próximos meses.
Banxico alertó que si bien la recuperación hasta ahora presentada es consecuencia de la apertura económica, esta también se ve sujeta a la evolución de la pandemia.
“Ante los retos que representan la eventual aprobación, distribución y aplicación de vacunas, persisten restricciones sobre la operación de varias actividades y el riesgo e rebrotes que impliquen mayores medidas de contención”.
En su reporte sobre el sistema financiero, Banxico indica que, como sucede en otros países, la recuperación también dependerá de la evolución que presente la demanda agregada.
En este contexto, alerta sobre la posibilidad de que la incertidumbre interna que ya ha afectado la inversión, provoque aún más afectaciones que lleven al diferimiento de más proyectos de inversión, o bien, a que los consumidores reduzcan su gasto por precaución.
Con ello, las expectativas del Banco de México respecto al crecimiento de la economía mexicana en 2021, se ubica en 3.3 por ciento, cifra que va en sintonía con la encuesta levantada por el banco central en el sector privado que la estimó en 3.29 por ciento.
“Representa una perspectiva más favorable (…) no obstante, prevalece un alto grado de incertidumbre en torno a dichas previsiones”, indicó Banxico.
Banxico recordó que en su reporte trimestral correspondiente a julio-septiembre de 2020, se observaron otros factores de riesgo como lo son episodios de volatilidad en los mercados financieros, que afectaría los flujos de financiamiento a economías emergentes; así como el hecho de que las medidas de apoyo tanto nacionales como extranjeras sean insuficientes.
Además de que las secuelas de las afectaciones causadas por la pandemia se prolonguen por más tiempo y que se presente una reducción en la calificación de la deuda soberana del país y de Pemex.
“En un contexto de prolongada debilidad de la demanda interna, los riesgos crediticios de los cancos y otros intermediarios financieros podrían aumentar”. Esto podría ser acompañado por un incremento de las primas para el país y un encarecimiento de los costos de financiamiento para entidades del sector público y empresas. CJG
ES DE INTERÉS |