Al atestiguar en el juicio contra Genaro García Luna, Héctor Villareal Hernández, tesorero en el gobierno de Humberto Moreira Valdés en Coahuila cayó en diversas contradicciones e incluso señalamientos inciertos al señalar la supuesta relación que aseguró mantenía el exlíder del PRI y el secretario de seguridad pública federal.
En el onceavo día de audiencias en la corte federal de Brooklyn, el exsecretario de Finanzas de Coahuila fue llamado por la Fiscalía como testigo cooperante quien además de señalar el desvío millonario de recursos presuntamente en la administración del priista, señaló que mantenía una relación cercana con García Luna.
“Por todos es conocida las discrepancias que mantuve, mientras ejercí como gobernador, con Felipe Calderón. Junto al fallecido gobernador de Colima, fuimos los únicos responsables políticos que no firmamos el desplegado de gobernadores que reconocía su triunfo en la presidencia de la República por lo que se hace del todo impensable que sostuviera una relación cercana con su principal colaborador, el Sr. Garcia Luna”, replicó el exlíder del PRI en un pronunciamiento aclaratorio.
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A decir de Villareal Hernández, él mismo acompañó al entonces gobernador Moreira en 2008 a un recorrido por el “bunker” de la Policía Federal, sin embargo, en ese año aún estaba en cimientos dicho bunker, ya que dicho Centro de Inteligencia se inauguró en noviembre de 2009. Además de que rechazado categóricamente por el exgobernador.
“Jamás recorrí ‘el bunker’ de la Secretaría de Seguridad”, refirió Moreira Valdés al aclarar que sólo en tres ocasiones coincidió con García Luna, y una de ellas fue una discusión vía nextel en la que señaló que le recriminó al entonces titular de la SSP “una invasión por parte de funcionarios policiales, portando armas largas a las instalaciones del comité directivo estatal del PRI”.
Justamente en 2008, refirió Villareal que García Luna intentó vender el software espía Pegasus, del cual se ha documentado que durante el sexenio de Felipe Calderón esa tecnología sólo estaba en poder de la Defensa Nacional.
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Otra de las impresiones en la que cayó Héctor Villareal, fue precisamente el señalamiento de que Humberto Moreira habría sido el intermediario entre García Luna y Juan Francisco Ealy Ortiz, presidente ejecutivo de El Universal, a fin de que el exsecretario “limpiara” su imagen pública mediante el pago de sobornos que supuestamente ascendieron a los 25 millones de pesos mensuales, bajo el falso concepto de publicidad.
“Resulta absurdo que un Secretario del Gabinete con la fuerza con la que gozaba García Luna, recurra a un gobernador para que sea intermediario ante un medio de comunicación, teniendo este mismo por su alta jerarquía la posibilidad de dirigirse a todos los medios y además la secretaría a su cargo contaba con su propio presupuesto para gastos en comunicación”.
Según la copia de una supuesta factura que mostró la Fiscalía, es la Secretaría de Finanzas, a cargo de Villareal, la dependencia que figura como la contratante de “publicidad” en dicho diario nacional para supuestamente beneficiar la imagen de García Luna, cuando es la Secretaría de Gobernación la instancia encargada de administrar, regular y aprobar el gasto en materia de comunicación social, promoción y publicidad.