Renuncia primer ministro de Haití
Haitian Prime Minister Ariel Henry, speaks to students during a public lecture on bilateral engangement between Kenya and Haiti, at the United States International University (USIU) Africa, in Nairobi on March 1, 2024. (Photo by SIMON MAINA / AFP)
/SIMON MAINA/AFP
En su lugar se nombrará a un primer ministro interino, que trabajará con un consejo presidencial de transición.
En medio de una nueva crisis diplomática, Ariel Henry, primer ministro de Haití, presentó su dimisión.
Henry hizo público su anuncio desde Puerto Rico, donde permanece varado, ya que la inseguridad en su país impidió que su avión pudiera aterrizar en el territorio. Asimismo, fue durante una reunión entre varios gobernantes de los países caribeños con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, que se dio a conocer la dimisión del primer ministro.
La reunión, que se realiza en Jamaica, fue organizada por la Comunidad del Caribe (CARICOM), que en los últimos meses ha estado trabajando para que se forme un gobierno de transición en Haití.
Según lo han expresado varias fuentes, se nombrará a un primer ministro interino, que trabajará con un consejo presidencial de transición.
“El gobierno que dirijo no puede mantenerse insensible ante esta situación. No hay sacrificio demasiado grande por nuestro país. El gobierno que dirijo se retirará de inmediato tras la instauración del consejo”, fueron las palabras con las que Henry se despidió de su puesto.
Irfaan Ali, presidente de Guyana, dijo a los medios que el nuevo gobierno de transición estará conformado por siete miembros con derecho a voto y dos sin voto.
Ariel Henry es recordado por ser el primer ministro que más tiempo estuvo en el cargo, ya que entró en posesión del puesto casi dos semanas después del asesinato del presidente Jovenel Moïse, el 7 de julio de 2021.
Pero también ha sido señalado debido a que no fue elegido por la población ni por el parlamento.
Actualmente, Haití se encuentra en una profunda crisis de violencia. Se estima que las pandillas criminales controlan cerca del 80% de la capital, lo que ha obligado a miles de ciudadanos a abandonar el país en busca de mejores oportunidades.
En este sentido, varios gobiernos han anunciado sus intenciones de intervenir para recuperar la gobernabilidad. Una de estas naciones es Estados Unidos, que esta semana anunció un gasto de 100 millones de dólares para financiar el despliegue de una fuerza multinacional en Haití.
Pero la participación de otros países podría verse obstaculizada por las propias pandillas. “Los haitianos tenemos que decidir quién va a encabezar el país y qué modelo de gobierno queremos (… ) También vamos a dilucidar cómo sacar a Haití de la miseria en la que se encuentra ahora”, dijo Jimmy Barbecue Chérizier, jefe de la pandilla más poderosa del país.
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