El sismo que alejó a los humanos por mil años

19 de Abril de 2024

El sismo que alejó a los humanos por mil años

Promo_578_Un superterremoto de Atacama del que nunca supimos obligó a los humanos a esconderse durante 1000 años

Aunado al movimiento telúrico, dos tsunamis contribuyeron al abandono de este asentamiento en el desierto de Atacama

El temblor más fuerte que pudo haber registrado el norte de Chile obligó a los supervivientes y las siguientes generaciones abandonar el sitio por al menos mil años. Esta fue la conclusión a la que llegó un grupo de expertos que analizaron la estructura terrestre en los tramos más altos del desierto de Atacama, y cuyos resultados publicaron en Science Advances.

Con una magnitud calculada de 9.5 grados, el megaterremoto no solo destruyó los asentamientos humanos de cazadores y recolectores hace tres mil 800 años, sino que también generó dos olas de tsunami que acabaron con cualquier estructura humana que pudiera haber sobrevivido.

“Se había pensado que no podía haber un evento de ese tamaño en el norte del país simplemente porque no se podía conseguir una ruptura lo suficientemente larga. Pero ahora hemos encontrado evidencia de una ruptura de unos mil kilómetros de largo frente a la costa del desierto de Atacama, y eso es masivo”, informó al respecto James Goff, geólogo especialista en tsunamis de la Universidad de Nueva Gales del Sur, Australia. El impacto, detalla, llegó incluso a Nueva Zelanda en un momento en que aún no había actividad humana, y dejó rastros parecidos a los encontrados en Chile.

Además de los restos de edificaciones y herramientas datadas del 1778 a.C los investigadores también encontraron rastros de vida marina, producto de los dos tsunamis resultantes. Rocas marinas, conchas y otros organismos fueron arrastrados, y es la distancia que recorrieron lo que descarta otros eventos como una tormenta, ya que incluso fueron localizados a grandes altitudes.

“La población local se quedó sin nada. Nuestro trabajo arqueológico encontró que siguió una gran agitación social cuando las comunidades se trasladaron tierra adentro más allá del alcance de los tsunamis”, explicó Goff. Este alejamiento duró por lo menos mil años, momento en que los temores pasaron o se olvidaron, lo que acercó de nuevo a los humanos a este sitio.

En la actualidad, el desierto de Atacama y otras zonas de Chile siguen siendo particularmente vulnerables a los megaterremotos gracias a su proximidad a la convergencia de las placas tectónicas de Nazca y Sudamericana. Los investigadores esperan que con este descubrimiento se refuercen las medidas de seguridad antes de un sismo para salvar vidas.