El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó este viernes a la empresa Ex-Cle Soluciones Biométricas por su rol en las elecciones legislativas del 6 de diciembre en Venezuela, que fueron denunciadas por Washington como una “farsa”.
Ex-Cle C.A., subsidiaria en Venezuela de una empresa argentina del mismo nombre, tiene contratos por “millones de dólares” con el gobierno de Nicolás Maduro, que no está reconocido por Washington, y una cincuentena de países más.
El pasado 6 de diciembre, Venezuela realizó unas elecciones parlamentarias boicoteadas por la oposición, en las que el oficialismo ganó 256 de 277 escaños.
“Los esfuerzos ilegítimos del régimen para robar las elecciones en Venezuela muestran su desprecio por las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano”, indicó el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Según las autoridades estadounidenses, las máquinas atravesaron un complicado periplo para llegar a Venezuela, pasando por varios países que mantienen conflictos con el gobierno de Donald Trump, ya que fueron compradas en China, volaron por Irán y fueron pagadas usando el sistema financiero ruso.
“Estados Unidos sigue comprometido en golpear al régimen de Maduro y a quienes apoyan sus objetivos de negarle al pueblo de Venezuela su aspiración de tener una elecciones libres y justas”, indicó el Departamento del Tesoro.
El jefe de la Diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, indicó que la utilización por parte de Maduro de las máquinas de Ex-Cle C.A. y de la empresa china CEIEC, acusada de restringir a la disidencia en internet, para “amañar el proceso electoral, no debería dejar ninguna duda de que las elecciones del 6 de diciembre fueron fraudulentas”.
Maduro respondió a Pompeo calificando de “estúpidas” las nuevas sanciones.
“El inefable, el impresentable Mike Pompeo (...) sacó unas sanciones estúpidas como buen imbécil que es, ya con sus maletas hechas, contra la empresa y los empresarios que fabricaron las máquinas para que el pueblo de Venezuela votara”, dijo el mandatario en un discurso ante la oficialista Asamblea Constituyente que tomó atribuciones de la saliente mayoría opositora del Parlamento.
Varios observadores internacionales señalaron irregularidades en las elecciones, acusando a Maduro de controlar la autoridad electoral.
El Departamento del Tesoro también impuso sanciones a dos ejecutivos de la empresa, un venezolano y un argentino con nacionalidad italiana, lo que implica la congelación de sus activos en Estados Unidos.
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