La Guardia Nacional no garantiza justicia: CNDH

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señaló que la “Guardia Nacional como se plantea no garantiza justicia”, y que en todo caso tiene efectos limitados y de corto plazo. Expuso que “confiar en el uso de la fuerza como recurso principal genera un gran riesgo de que se presenten o propicien violaciones a los derechos humanos”.

A través de un comunicado, el Organismo explicó que “por mejor capacitado que esté un cuerpo que asuma funciones policiacas, poco o nada abonará al abatimiento de la impunidad si no contamos con fiscalías autónomas, eficientes, con recursos y capacidades suficientes para que los delitos se investiguen y las sanciones a los responsables sean posibles”.

La CNDH emitió su pronunciamiento en el marco del proceso de discusión para la reforma de diversos artículos de la Constitución Política mexicana, a efecto de redefinir la integración, organización y atribuciones de la Guardia Nacional. En el documento detalló que ve con preocupación que tras su replanteamiento, la Guardia Nacional quede mayoritariamente conformada por elementos de las Fuerzas Armadas, lo que contraviene a los principios constitucionales.

Del mismo modo señaló que el uso de las Fuerzas Armadas no es la solución para los problemas de violencia e inseguridad que enfrenta el país y que sólo es una parte de la misma. La Comisión aseguró que el replanteamiento de la Guardia Nacional generaría el riesgo de que se vulneren derechos humanos y debilitaría la institucionalidad civil y democrática, sin acabar por sí sola con la impunidad.

El organismo detalló que la estrategia es contraria al sentido de garantizar la primacía y división de las autoridades civiles sobre las militares, y a la recomendación de instancias internacionales que señalan que las tareas de seguridad pública deben quedar en manos de instituciones de carácter civil y reducirse, al mínimo indispensable, la participación militar.

Sin embargo, la CNDH aclaró que no se opone a la participación temporal y extraordinaria de las Fuerzas Armadas en tareas vinculadas a la seguridad de las personas de forma regulada conforme a derecho. Asimismo, calificó de no deseable pero necesaria...

...tal presencia a efecto de contrarrestar las actividades del llamado ‘crimen organizado’, ante la falta de recursos y capacidades para tal efecto por parte de las policías civiles y la frecuente penetración y toma de las mismas por parte de las referidas organizaciones delictivas.

Además de derivar en posibles violaciones a derechos humanos, la actual propuesta de reforma Constitucional “no establece cómo se van a desarrollar a las policías civiles, cuál será el destino y papel de las policías que actualmente se encuentran operando, ni las bases y términos en que se daría la coordinación entre instancias de los tres niveles y órdenes de gobierno y, mucho menos, con los Ministerios Públicos”.

De igual forma, la iniciativa es omisa en precisar los mecanismos de transparencia, rendición de cuentas y supervisión externa a los que tendría que estar sujeta la Guardia Nacional en el ejercicio de sus funciones, los cuales, necesariamente, tendrían que ser de carácter civil.

La CNDH recomendó una ruta para el desarrollo y fortalecimiento de las policías e instituciones civiles, tanto federales como locales y municipales, a efecto de que sean ellas quienes asuman la seguridad pública, contemplando un plan para el retorno gradual y verificable de las Fuerzas Armadas a las tareas que les son propias.

Finalmente, la Comisión insistió en la necesidad de contar con fiscalías autónomas en todos sus aspectos, con los recursos y capacidades administrativas y operativas necesarias para desarrollar debida y oportunamente sus labores. MM

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