Este método de cuidado de la piel es reconocido como uno de las más fuertes de Corea y busca lograr una piel impecable, suave, luminosa, sana y con textura uniforme, justo como la miel. La finalidad de tener un look de miel se basa en que te puedas ver más natural, para lograrlo se debe aplicar capas de productos hidratantes e iluminadores sobre la piel para darle una hidratación constante e intensa. Suena difícil, pero lo único que necesitas es disciplina, paciencia y los productos correctos. Para llegar al efecto final, es importante empezar por lo más básico, pero se podría decir que lo más importante. Retira cualquier impureza o cualquier residuo de maquillaje con un limpiador que no actúe de manera agresiva contra tu piel. Esto lo lograrás con uno que tenga una base de aceite. Después limpia por segunda vez con un limpiador con efecto hidratante. Además de productos hidratantes, es muy importante utilizar un buen tónico que restaure el pH de tu piel. Recuerda aplicarlo con un pad de algodón por la mañana y antes de dormir. Cuando una piel está hidratada, se nota, pero aún más importante, está sana, lo cual previene que sufra de irritaciones tan fácil. Para asegurar una apariencia con un brillo extra agrega a tu rutina un aceite facial o un suero. Consigue un efecto profundo y protege la barrera de hidratación de tu piel con una crema que tenga los ingredientes para lograrlo. Uno de los que debes de tener como aliado es el ácido hialurónico, el cual llega a absorber hasta 1000 veces su peso en agua, con su aplicación no hay manera que tu piel no se vea tan radiante como la miel. Logra una hidratación intensa en minutos con una mascarilla hecha de fibras naturales, ceramidas y Aloe Vera. Una muy buena opción para cualquier tipo de piel, ya que sea cual sea que tengas, notarás un efecto luminoso y liso. Honey skin no busca que la piel se vea radiante, sino que luzca hidratada ¡Pruébala, no te vas a arrepentir!