La creatividad como herramienta vital
EL USO DE TÉCNICAS narrativas ayuda a estudiantes de primaria a encontrar soluciones tanto para los problemas típicos de su edad como a los desafíos más complejos y personales

El pensamiento creativo no sólo es funcional e imprescindible para que artistas y creadores cumplan con sus trabajos o, como se suele manejar en la actualidad, para que los empleados aporten más a sus empresas generando innovación.
Se ha demostrado que la creatividad es importante también, y quizá sobre todo, para que la gente en general encuentre soluciones satisfactorias para sus problemas cotidianos y para que tenga una vida más plena y satisfactoria. Y algunas evidencias recientes añaden aún más beneficios:
La narrativa como solución
“Cuando le pides a la gente que cambie su perspectiva e imagina que recibe el consejo de un amigo, obtienes soluciones a los problemas mucho más creativas y efectivas que simplemente intentar resolver el problema tú mismo”, dice Angus Fletcher, autor principal de un estudio en que se probó cómo la creatividad narrativa podía ayudar a niños de los últimos tres grados de la escuela primaria.
Fletcher es licenciado en neurociencia por la Universidad de Michigan y doctorado en literatura por la de Yale y en el Narrative Project de la Universidad Estatal de Ohio hace investigación por medio experimentos, historia literaria y teoría sobre los efectos psicológicos de diferentes técnicas narrativas.
En el estudio, publicado en la versión en línea del Journal of Creativity, se pidió a un grupo de niños en un campamento de verano que aplicaran una técnica de entrenamiento de la creatividad que se llama cambio de perspectiva, es decir, que pensaran en un amigo, vecino o primo que podría ayudarlos a resolver cualquier problema, mientras que a otro grupo no se le brindó esta opción.
Se pidió a los niños que trataran de resolver dos tipos de problemas, primero uno sencillo y típico de su edad (como “no puedo ir al cumpleaños de un amigo porque saldré con mis papás); pero también pensaron en problemas desafiantes que tenían en sus propias vidas, como “mi hermano tiene un trastorno de comunicación”, “mi papá va a ausentarse por un par de meses” o “mi hermana me intimida”.
Al menos 94% de los niños capacitados en cambio de perspectiva proporcionaron una solución para ambos tipos de problemas; mientras que, sin la capacitación, menos de la mitad de los estudiantes pudieron ofrecer soluciones a los problemas sencillos, y con los desafiantes la gran mayoría se dieron por vencidos u ofrecieron soluciones desde el pensamiento mágico, como decir que podrían convertirse en superhéroes.
Por otra parte, maestros capacitados calificaron la creatividad de las soluciones con la Técnica de Evaluación Consensuada (una herramienta muy usual en estudios psicológicos) y vieron que con capacitación, la puntuación promedio de creatividad fue de 6.44 sobre 10 en comparación con 3.05 para aquellos que no recibieron la intervención.
Estos resultados mostraron que el entrenamiento de la creatividad podría aumentar lo que se conoce como el sentido de autoeficacia de los niños: la idea de que tienen cierto control y poder sobre sus propias vidas, señala Fletcher. Un segundo estudio mostró de mejor manera este resultado.
Narrativa para la resiliencia
Además del cambio de perspectiva, en el segundo estudio se capacitó a los estudiantes en otras técnicas de creatividad narrativa, como el pensamiento causal. Así, si los niños no podían resolver un problema, se les entrenó para retroceder y pensar en el porqué del problema y en la importancia que este tiene.
“A menudo descubrimos que si piensas de manera más amplia sobre lo que estás tratando de lograr y por qué es importante, entonces puedes ver que hay otras maneras de lograr lo que deseas”, dijo Fletcher a Ohio State News, un medio de su universidad.
Para probar la resiliencia, el equipo de investigación introdujo una variable inesperada: Cuando, como en el primer experimento, los niños presentaron soluciones a los problemas típicos de su edad y a los suyos propios se les dijo que éstas no funcionarían.
›Quienes habían recibido el entrenamiento con técnicas narrativas, sin que parecieran sentirse afectados, pudieron encontrar otra solución. Además, sus segundas soluciones tuvieron calificaciones más altas en creatividad y en utilidad, que es la probabilidad de que tengan éxito en el mundo real.
Fletcher dijo que este estudio proporciona un mensaje esperanzador: hay cosas que podemos hacer para ayudar a los niños a afrontar sus problemas.
Epílogo teórico
“El uso de la narrativa para entrenar la creatividad no es nuevo”, señalan en el texto Fletcher, Patricia Enciso y Mike Benveniste, y sus colegas de la Universidad Estatal de Ohio; pero, añaden, el conocimiento generado no se ha incorporado sistemáticamente en la educación en ningún nivel”.
Por esa razón, ellos, en otra publicación, propusieron una teoría de la creatividad narrativa, basada en la teoría narrativa moderna y la neurociencia, que resumen en tres puntos que buscaban probar con los experimentos:
• La narrativa puede ser más que un producto de la creatividad: puede ser un impulsor de la misma. Esto se debe a que la narrativa no evolucionó como herramienta de comunicación sino de generación de planes y estrategias innovadoras.
• La narrativa es una fuente importante de creatividad en los niños pequeños, quienes no generan ideas de forma lógica ni aleatoria, sino a través de juegos de rol e imaginando mundos alternativos.
• La creatividad narrativa está vinculada a la resiliencia, la cual no puede reducirse simplemente a perseverancia de seguir intentando a pesar de los reveses y la frustración. La resiliencia “requiere flexibilidad y adaptabilidad, o en otras palabras, nuevos planes y estrategias, los cuales pueden generarse a través de la creatividad narrativa”.
1% superior
en la evaluación Torrence de creatividad es donde se encuentran los humanos que más desarrollada tiene esta capacidad; También ahí se ubicó a ChatGPT-4
“El entrenamiento de la creatividad puede ayudar a los niños a idear un segundo plan cuando las cosas no les funcionan”.
Angus Fletcher, profesor-investigador
de la Universidad Estatal
de Ohio y miembro del Narrative Project.