Movilidad y Ambiente: Un mismo Camino

12 de Diciembre de 2025

Miriam Saldaña
Miriam Saldaña

Movilidad y Ambiente: Un mismo Camino

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Miriam Saldaña

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EjeCentral

Una mujer puede hacer hasta siete recorridos al día, desplazándose al trabajo, al mercado a la escuela por los hijos etc. Cuando hablo de proximidad urbana, no me refiero solo a distancias cortas. Para mí, la proximidad es una herramienta para reducir desigualdades y crear ciudades más habitables. Muchas veces vivimos la ciudad como un espacio fragmentado que nos obliga a recorrer grandes distancias para acceder a servicios básicos, perdiendo tiempo y calidad de vida. Esa fragmentación también genera impactos ambientales que se vuelven cada día más evidentes. Por eso, cuando reviso las políticas públicas actuales de la Ciudad de México, identifico avances importantes que deben fortalecerse desde una visión ecológica y social. La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (SEDEMA) ha documentado que una de las acciones más relevantes para enfrentar el cambio climático es reducir el uso del automóvil y promover la movilidad activa.

Entre estas acciones se encuentra la ampliación de infraestructura ciclista y la movilidad no motorizada, que permiten disminuir emisiones y mejorar la calidad del aire. Según datos oficiales, entre 2018 y 2024 aumentaron los viajes en bicicleta en la ciudad en un 71 %, gracias a la expansión de ciclovías y la modernización de ECOBICI. Esta evidencia confirma que invertir en proximidad y movilidad sustentable tiene resultados medibles y concretos. Reducir desplazamientos largos, promover la vida de barrio y facilitar el acceso a servicios esenciales como salud, alimentos, cultura y espacios públicos. Esta idea está alineada con información de SEDEMA que destaca la importancia de crear entornos donde caminar y usar la bici sea seguro, accesible y cotidiano, disminuyendo así contaminantes y estrés urbano.

En la discusión ambiental de la ciudad, el agua es otro elemento clave. La Secretaría de Gestión Integral del Agua (SEGIAGUA) ha informado que en la ciudad se detectan y atienden más de 100 fugas no visibles cada semana, y que se han reparado miles de fugas con el objetivo de recuperar caudales y garantizar el acceso al agua potable. Este tipo de acciones también están vinculadas a la proximidad, porque vivir en una ciudad más equilibrada implica asegurar que el agua llegue a los hogares sin pérdidas, sin inequidades y sin prácticas insostenibles.

En la Ciudad de México esto toma otra dimensión: al reconocer que nuestras urbanizaciones estuvieron marcadas por modelos de crecimiento que favorecieron el automóvil, centros alejados y periferias desconectadas. La planeación actual, por el contrario, debe impulsar ciudades más compactas, con mejor distribución de servicios y con infraestructura verde que permita mejorar la salud ambiental. SEDEMA, por ejemplo, enfatiza la importancia de incrementar áreas verdes, restaurar ríos así como yo propongo rescatar río la Piedad y las barrancas de río Becerra, ampliar programas de reforestación y corredores biológicos urbanos.

Estas acciones ayudan a reducir islas de calor, mejorar la calidad del aire y aumentar la biodiversidad en zonas urbanas y también debe integrar esta visión ecológica donde las áreas verdes, el agua y el espacio público sean parte esencial de la planeación. Hablar de proximidad no implica copiar modelos extranjeros, sino aplicar políticas coherentes con la realidad local. Las dependencias oficiales insisten en este punto: nuestras soluciones deben partir de las condiciones específicas de la Ciudad de México.Esto incluye sus retos en movilidad, agua, contaminación, densidad poblacional y crecimiento urbano. En lo personal, considero que avanzar hacia una ciudad más cercana, accesible y sostenible no es solo una estrategia técnica; es una necesidad ambiental y social. La evidencia oficial es clara: cuando disminuyen los viajes motorizados, cuando hay infraestructura para caminar o pedalear, cuando se reparan fugas de agua, cuando aumentan las áreas verdes y cuando el espacio público se vuelve seguro, la ciudad mejora para todas y todos.