Segunda vuelta
Parecía que el hoy diputado Cuauhtémoc Blanco había librado la acusación por intento de violación y un posible desafuero, sin embargo, no todo está dicho todavía

Hay dramas que devienen en historias que no se cierran hasta tener un final de verdad dramático. La de Cuauhtémoc Blanco parece una de esas.
Luego de que Morena en pleno, con sus mujeres por delante, lo defendiera hasta la ignominia y le prometiera que “no estás solo”, el caso parecía cerrado. Sin embargo, es tal la antipatía por lo que representa uno de los políticos más limitados e impresentables de la historia moderna de México, que ayer llegó al Congreso un documento, firmado por alrededor de 23 mil personas, para exigir el desafuero y la sujeción a proceso del legislador morenista, exfutbolista y, sobre todo, exgobernador de triste memoria en Morelos.
El caso Blanco no ha terminado, pues aún faltan cosas por ver.