Sabotaje a trenes en Guanajuato: Cortan rieles con oxicorte ¿Quién lo hace y por qué?

Una nueva y peligrosa forma de atacar los trenes de carga tiene en alerta a Guanajuato. Delincuentes están usando oxicorte (una herramienta industrial que corta metal con fuego) para saberar los rieles del ferrocarril a propósito. ¿El objetivo? Forzar que los trenes se detengan o incluso se descarrilen para poder robar la mercancía que llevan. El último ataque de este tipo pasó en Cortazar, y aunque el maquinista logró parar a tiempo, el riesgo es enorme: pone en peligro la vida de los trabajadores del tren y puede causar un accidente grave.

La empresa Ferromex reporta que este no es un caso aislado. Solo en este año han puesto casi 1,900 denuncias por robos y ataques al ferrocarril en Guanajuato. Lo que más preocupa a las autoridades es que esta zona es clave para el transporte de mercancías en el país y, además, aquí se planea construir en el futuro el Tren Interurbano, un proyecto grande del gobierno que también podría estar en riesgo si no se detiene esta ola de sabotajes.

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¿Qué pasó con el tren saboteado en Cortazar, Guanajuato?

El ataque al tren de carga más reciente y que encendió todas las alarmas sucedió en la madrugada del 30 de diciembre de 2025.

• ¿Dónde? En el municipio de Cortazar, Guanajuato.
• ¿Qué hicieron? Con oxicorte, hicieron un corte de 40 centímetros en uno de los rieles. Un hueco así es más que suficiente para que un tren se salga de las vías.
• ¿Qué pasó con el tren? Por suerte, el maquinista vio el corte a tiempo. Pudo frenar y detener el tren antes de pasar por encima, evitando un desastre.
• ¿Y ahora? La empresa Ferromex ya puso una denuncia ante la Fiscalía (FGR) para que se investigue como un sabotaje, que es un delito grave.

¿Quién está saboteando los trenes y por qué lo hacen?

Según las primeras investigaciones de las autoridades federales, todo apunta a que estos ataques los hace el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), un grupo de crimen organizado que opera en esa zona de Guanajuato.

Su motivación es simple: robar. Guanajuato es un estado con muchas fábricas y el tren transporta mercancías de mucho valor (autopartes, electrodomésticos, materiales, etc.) por sus vías. Al cortar el riel, logran que el tren se detenga obligatoriamente. Una vez parado, es mucho más fácil para ellos subir y saquear los vagones. Es una forma violenta y arriesgada de robo que prioriza el botín sobre la seguridad de todos.

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¿Por qué es tan peligroso que corten los rieles del tren?

Este no es un robo común. Cortar los rieles a propósito es extremadamente peligroso por varias razones muy claras:

1. Puede matar a la gente del tren: Si el maquinista no ve el corte a tiempo, el tren se descarrila. Esto puede causar la muerte de los conductores y trabajadores que van a bordo.
2. Pone en riesgo a pueblos cercanos: Un tren descarrilado, especialmente si carga materiales peligrosos, puede explotar o derramar sustancias tóxicas en comunidades cercanas a las vías.
3. Daña la economía de todos: Un accidente férreo destroza locomotoras, vagones y la vía. Repararlo cuesta millones y esa línea de tren queda paralizada por días o semanas, retrasando productos que necesitan fábricas y tiendas en todo el país.
4. Amenaza el futuro: Por esta zona de Guanajuato, el gobierno quiere construir el Tren Interurbano. Si los ataques continúan, nadie querrá invertir y el proyecto podría cancelarse o retrasarse años, afectando el desarrollo de la región.

Hay otro problema: parece que hay poca coordinación. El gobierno del estado de Guanajuato dijo que no recibió un reporte directo de la empresa sobre este sabotaje, mientras que Ferromex ya denunció ante las autoridades federales. Esta falta de comunicación dificulta la respuesta.

El sabotaje con oxicorte en Guanajuato es una señal de alarma máxima. Muestra que los grupos criminales están dispuestos a poner en riesgo vidas y una infraestructura vital del país con tal de robar. Ya no es solo asaltar un tren, es intentar provocar un accidente catastrófico.

Detener esto requiere una acción fuerte y coordinada entre la empresa, la policía estatal y el gobierno federal. Si no se protegen las vías del tren, no solo se pierden mercancías, sino que se pone en juego el futuro del transporte y la seguridad de miles de personas que viven, trabajan o viajan cerca de las vías del ferrocarril. DJ

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