Las que usted diga, sr. Presidente

28 de Julio de 2025

Enrique Lazcano
Enrique Lazcano
Periodista con más de 35 años de carrera. Conocido por conducir espacios informativos en Radio y Televisión. Es presidente fundador de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión A.C. Premio México de Periodismo Ricardo Flores Magón 2022.

Las que usted diga, sr. Presidente

Enrique Lazcano

Durante mucho tiempo se utilizó esta frase, para representar de forma clara, los niveles de respeto y abyección que se le tenía a los titulares del ejecutivo federal en el país. Me quedo - por supuesto- con el obligado respeto que merecen quienes tienen o han tenido su pecho cruzado por la banda presidencial.

Eso es una cosa, la otra es - como decíamos - una actitud lacayuna. Sin lugar a dudas no es fácil desmarcarse de lo que afirman en algún momento nuestros jefes. Todos hemos estado en esas incómodas circunstancias. Sin embargo, si el desacuerdo con nuestro superior trae consigo la probabilidad, por mínima que sea, de evitar afectación a terceros, no quedará más que en un acto de congruencia: decirle ¡NO! A quien sabemos no le asiste la razón.

Está situación no tan hipotética. En México se dio de forma muy clara durante la pandemia por Covid. Desde las primeras etapas del operativo para evitar contagios, la actitud del llamado zar anti-Covid comenzó a dejar muchas dudas sobre la objetividad con la que tendría que informar sobre las responsabilidades de su encargo. Se dedicaba más a la lisonja,que a resolver los problemas inherentes a la emergencia.

Podemos entender perfectamente que una situación como la del Covid, rebase a cualquier Gobierno. Sin embargo, no podemos dejar de lado que otras naciones con más o menos la densidad poblacional de la nuestra, como Japón, , solo registraron 74 mil 680 personas muertas. En México … 800 mil muertes. En esta terrible cifra, se cuentan los miles de trabajadores de la salud que perdieron la vida en los primeros tiempos de la pandemia.

Recuerdo, y yo le pido que no las olvide, algunas de las imborrables frases de este personaje ! El presidente no es factor de contagio !” Otra, refería a lo catastrófico que podría ser el futuro. “ Muy catastrófico serían 60 mil muertos” esto último lo declaró, después de retractarse de la cifra de 30 mil que se manejó en un principio. Luego el espectáculo de sus informes diarios. “El cubrebocas da una falsa sensación de seguridad” ( 20 03 20) o aquella maravillosa “!El cubrebocas sirve ….: para lo que sirve ! Y no sirve para lo que lo sirve!”

Aquellos días, traían también, la necesidad de continuar con los tratamientos de salud, de una parte muy sensible de la sociedad, me refiero a los pequeños , que en aquellos tiempos vivían el desabasto de medicamentos oncológicos. Y ahí, en un programa de televisión,el mismo López Gatell afirmó que los reclamos de los padres de estos niños enfermos tenían una narrativa “Golpista” . ¿Habrá algún padre que teniendo la desgracia de tener un hijo enfermo, realmente vaya a estar planeando golpes de estado?

Puedo entender, repito, que si trabajamos con un político de nivel presidencial sea complejo llevarle la contra. López-Gatell, tendría que haber advertido al presidente lo riesgoso que era convocar a la sociedad a que saliera, que no dejaran de ir a comer ni dejar de darse abrazos. Él tendría que haberle dicho del riesgo de creer que con una estampa religiosa podrían estar seguros. Tendría que haber sido muy preciso y estricto, cuando un gobernador afirmaba que el Covid, se curaba con Mole de Guajolote. Quizá, para no ser tan exigentes, nos hubiéramos conformado,con que no saliera a la calle sin cubrebocas, tal como sucedió en la Colonia Hipódromo.

Este funcionario fue incapaz. La pandemia lo rebasó de forma dramática. Lo mismo al evanescente secretario de Salud de aquellos años. Los muertos, que se contaron por miles, no merecen, ni sus familias , que el hombre encargado de cuidarles, y que fracasó en su tarea, sea ahora premiado , representando a México. Quiso ser alcalde, no le alcanzó, quiso ser legislador, no le alcanzó , quiso ser jefe de Gobierno, menos aún.

Algún día este funcionario impresentable tendrá que explicar lo sucedido en aquellos terribles tiempos de la pandemia . TIC, TAC, TIC TAC …. Doctor, ¿Qué horas son?