El presidente de Chile, Sebastián Piñera, aceptó este lunes la renuncia del ministro de cultura, Mauricio Rojas, sólo cuatro días después su nombramiento, esto por las críticas que este último expresó contra el Museo de la Memoria, recinto que recuerda a las víctimas de la dictadura de Pinochet. El también escritor, Mauricio Rojas, había sido nombrado el pasado jueves en el cargo, en el marco del acotado ajuste de gabinete que Piñera realizó, a cinco meses de haber asumido su segunda administración. Sin embargo, tras su nombramiento, la prensa local recordó la frase que Rojas escribió hace tres años en el libro “Diálogo de Conversos”, en el cual calificó de “montaje” al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. El espacio cultural recuerda a las 3 mil 200 víctimas, entre muertos y desaparecidos, que dejó la dictadura de Augusto Pinochet, que duró de 1973 a 1990.
(El museo) se trata de un montaje cuyo propósito, que sin duda logra, es impactar al espectador, dejarlo atónito, impedirle razonar”, afirmó Rojas en el libro que escribió junto al hoy canciller Roberto Ampuero.
Sus declaraciones fueron duramente criticadas por personajes ligados al mundo cultural chileno, que exigieron de inmediato su renuncia por “relativizar” las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas durante la dictadura.
Como presidente de Chile y pensando solo en el mejor interés de nuestro país (...) he decidido aceptar la renuncia del ministro Mauricio Rojas”, dijo el Piñera, en una intervención este lunes en el palacio presidencial de La Moneda.
Por otro lado, el ahora exministro de cultura se defendió argumentando que sus palabras de hace tres años no reflejan su postura actual.
Las declaraciones de hoy en La Tercera sobre el Museo de la Memoria provienen de una entrevista antigua que no refleja mi pensamiento actual. Nunca he minimizado ni justificado las inaceptables, sistemáticas y gravísimas violaciones de los derechos humanos ocurridas en Chile.
https://twitter.com/MauricioRojasmr/status/1028367143891558401 En su reemplazo, el mandatario chileno nombró a la arqueóloga Consuelo Valdés. Sin embargo, durante su discurso de designación, el presidente afirmó que tampoco comparte la “intención de ciertos sectores de nuestro país que pretenden imponer una verdad única y que no tienen ninguna tolerancia ni respeto por la libertar de expresión y la libertad de opinión de todos nuestros compatriotas”. El museo de la Memoria y los Derechos Humanos fue inaugurado en 2010 por la entonces presidenta Michelle Bachelet.