Los intereses vitales de la especie humana parecen chocar con las mentes necias y obtusas empecinadas en acelerar el calentamiento global.
El final de lo orgánico, el final del “animal reflexivo”...La extinción de la “bestia pensante”, el colapso de la organización humana por la contaminación planetaria totalmente irresponsable y solo por el lucro feroz, inicuo e insaciable de unos pocos.
Como símbolos absurdos y ominosos del lucro utilitarista se contaminan desquiciada y porfiadamente los mares, ríos y el aire sin importar a los gobiernos que con la quema, los derrames y la extracción intensiva de los hidrocarburos se acaricia la ruina anticipada de todo el edificio evolutivo.
La dificultad me desanima y la futilidad me desagrada, pero como a muchos millones de personas también me preocupa que en esa vorágine esquizoide se sigan impulsando irresponsable y comodinamente las mismas energías y combustibles fósiles que en los albores de la era industrial fueron impulsoras del desarrollo y de sueños que ahora son una auténtica pesadilla al dejar a las generaciones futuras el planeta convertido en un enorme basurero.
“Trágico privilegio del planeta que habitamos escribía Huxley, único hasta ahora conocido en el universo observable donde el ciego juego de las moléculas trajeron al cerebro humano y éste solo atinó a depredarlo y a contaminarlo”.
Sin dejar de preocuparme por expresar una opinión sobre un tema difícil y que no domino, me anima hacerlo solo de pensar que este planeta donde nos toca vivir existía mucho antes que la especie humana apareciera sobre su faz...somos seres advenedizos si como geológicamente está demostrado los estratos terrestres datan de 4.500 millones de años y según los restos fósiles los dinosaurios se extinguieron hace más de 65 millones de años, pero entre toda la flora y la fauna existente somos los únicos empecinados en destruir nuestro propio entorno vital y en un lapso tan corto que para el universo es solo un instante.
No deja de ser una paradoja monumental que el único ser pensante en esta aislada y pequeña porción del universo, sea lo más avanzado y al propio tiempo el más salvaje y contumaz depredador.
De sobra está demostrado el grave daño que le hemos causado a la biósfera con la quema intensiva de los combustibles fósiles y sus derivados como los plásticos que no se degradan sino en muchos años y con todo ello hemos ensuciado mares, ríos, lagos, mantos freáticos y la atmósfera con sustancias y gases nocivos producto de la combustión provocando cambios dramáticos en el clima (que en un populismo de derecha y ramplón con Mr. Trump a la cabeza algunos se empecinan en negar) sequías e inundaciones devastadoras, incidencia de enfermedades respiratorias, del cáncer, falta de cosechas oportunas y en el horizonte severas hambrunas por esa terquedad suicida de los combustibles fósiles que nos acercan a una hecatombe humanitaria.
Algunos expertos alarmados por lo que consideran la "última llamada” antes del no retorno en el calentamiento global, no solo aconsejan estimular y financiar energías limpias alternativas como la solar, la biomasa, la eólica, la geotérmica, la “pirólisis” para quemar toneladas de basura diariamente y con ello producir energía eléctrica, sino que en su desesperación dicen que hasta la energía atómica bien manejada es un “monstruo más leal” contra esa dialéctica de las tensiones de las sinarquías neoliberales de un capitalismo desregulado, sombrío, asaz vulgarizado y su hirsuta , asaz brutal voracidad para amasar riqueza mal-habida y por la que arremeten incivilizadamente contra los más de siete mil millones de seres humanos que hoy respiran inmundicias, toman agua contaminada y mueren por patologías relacionadas directamente por la toxicidad ambiental.
En esa tesitura de mentiras con orejas de verdades torcidas en septiembre del 2013 publiqué una columna que titulé “Nadie puede ser ajeno” y en ella adelantaba la necesidad colectiva de que los mexicanos nos organizáramos contra la artera y privatizadora modificación de los artículos 25, 27 y 28 constitucionales como reinicio de la embestida orquestada por organismos internacionales y las grandes petroleras trasnacionales en su añeja pretensión de apropiarse no solo de los activos de “Pemex”, sino del vellocinio de oro (el único que le quedaba a México) integrado por las reservas probadas, probables y posibles de nuestro país en materia de petróleo y de gas como la más codiciada pieza del botín neoliberal privatizador de los bienes nacionales.
Todos sabemos que sucedió después de esa artera modificación al texto fundamental...
Camarillas pactistas amañadas, partidos políticos y Legisladores con previo reparto escandaloso de cuotas, prebendas y privilegios le impusieron al país una pila de leyes (secundarias) mal imbricadas, confusas, mal cohonestadas y hasta contradictorias a las que felónamente denominaron “Reforma energética” en la que se desdeñaron las energías limpias alternativas y solo quedó en otra burda superestructura para el más inaudito trasvase, traspaso y cínico robo a la nación.
En lugar de un cambio del modelo energético los apócrifos númenes del mismo y eterno santoral depredador, las élites apóstatas rapaces, subversivas, corruptas y voraces en su hipocresía catedralicia enarbolaban la reforma petrolera como quimera ridícula y urgente panacea sobrevendiéndola como mágica y milagrosa en un alevoso, sesgado, obtuso y cretino populismo de derecha ...
Un día sí y otro también los peores enemigos de México, el trabuco de los más rudos y turbadores conjurados de la apergaminada criminalidad perfumada de cuello blanco nos “argumentaba” las 24 horas por todos los medios totémicos que la Reforma en materia de hidrocarburos era ineludible e inaplazable aduciendo falsamente que “Pemex” no podía solo y que había de imponerle de manera inapelable a las “hermanas de la caridad” que el mundo conoce en sinécdoque abusiva como la Shell, Chevrón, Exxon, BP y otras cuñas contra el desarrollo nacional y que ahora con las puertas de par en par llegan para acelerar el prolapso del neoliberalismo criollo entreguista, bajuno mismo que se sienta a la mesa de los cazadores oportunistas extranjeros para repartirse el botín, flexibilizando las licitaciones para facilitar el despojo a la nación...
Se alegaba que “Pemex” se convertiría en “empresa productiva del Estado” cuando ya lo era y totalmente rentable antes de impuestos... se destruye a “Pemex” para así repartirse su activos en delincuencial apropiación activa.
“Pemex” no perdía, era (lo es aún hoy) saqueado por la SHCP con un régimen fiscal de auténtico pillaje y también con los recortes mortales.
Por ahora y por razones de espacio concluyo repitiendo lo que desde 2013 adelanté: La Reforma Petrolera dejó al país más fregado, sin autonomía energética y está siendo sepultado bajo los escombros dejados por ellibertinaje donde no solo se roban las reservas de petróleo y gas de éste país, también los ductos, los almacenes y las más de 50 empresas de Pemex como la refinería “Deer Park” en Texas , PMI comercio internacional, SANMA campos maduros, Pemex Servicios Europa y otros que desglosaré en mi próxima colaboración.
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