¿Quiénes primero?

28 de Abril de 2024

Enrique Del Val
Enrique Del Val

¿Quiénes primero?

enrique del val

Ahora que empezarán a llegar las vacunas que diversas empresas del mundo están elaborando, viene otra de las etapas más difíciles: la que se refiere a la manera en que éstas serán distribuidas entre la población.

La semana pasada, en un interesante artículo publicado en el periódico estadounidense The New York Times, las columnistas Abby Goodnough y Jan Hoffman escribieron sobre la discusión que se está dando en dicho país referente a quién vacunar primero, debido a que hay diversas posiciones entre los expertos de cómo aplicarla entre la población para cumplir no sólo con los señalamientos éticos sino también prácticos.

Las diferencias que existen versan entre ponérsela primero a los adultos mayores, o a los trabajadores que arriesgan todos los días su vida por la exposición ante el virus.

El Centro para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) ha decidido que primero serán vacunados los empleados del sector salud y los adultos mayores más frágiles que están en los asilos, pero a partir de ahí hay varias posiciones al respecto.

El Departamento de Seguridad Nacional del gobierno estadounidense ha elaborado un documento en el cual señala que los “trabajadores esenciales” son alrededor del 70% de la fuerza de trabajo de esa nación, es decir 90 millones de habitantes, y dentro de esa clasificación hicieron otra, a los que llamaron “primera línea”. Entre éstos últimos se encuentran quienes atienden las tiendas de alimentos, las plantas nucleares, los policías, etc. Muchos analistas han considerado que es una lista muy grande y que habría que reducirla, sobre todo tomando en cuenta que en lo inmediato no hay vacunas para todos por lo cual se tienen que tomar decisiones difíciles a nivel de cada Estado.

Existe un comité técnico independiente de expertos médicos que asesoran al CDC en materia de vacunación y próximamente votarán sobre a qué sector recomiendan vacunar en lo que han denominado fase 1b.

En la reunión que tuvieron el mes pasado, los 14 miembros del comité votaron por poner en primer lugar de la fase 1b a los trabajadores esenciales, delante de los adultos mayores. Uno de los argumentos que esgrimieron es que se trata de un problema ético, debido a que la gran mayoría de los trabajadores esenciales pertenecen a las minorías, con salarios muy bajos y poca educación, lo que les hace ser de los más expuestos al virus.

También existen discusiones en el caso de los profesores, algunos estados de esa nación los consideran como prioritarios para recibir la vacuna y otros no, bajo el argumento de que la mayoría de las lecciones son virtuales y no presenciales y, además, son un grupo privilegiado, en su mayoría blancos y bien pagados.

El artículo finaliza diciendo que se encuentran dentro de líneas borrosas las decisiones de prevenir las muertes de los adultos mayores o de prevenir la transmisión del virus entre los trabajadores esenciales y que, además, las pruebas no han demostrado que alguien vacunado no pueda infectar a otros.

En nuestro país ya se nos informó el martes pasado cómo van a ser las fases de vacunación, la cual empezará este mes con el personal de salud de primera línea y, aunque no se dijo allí, ya se había anunciado que también el personal de las Fuerzas Armadas serán de los primeros, principalmente los encargados de la vigilancia y aplicación de las vacunas.

Las siguientes etapas serán las de adultos mayores, luego los de 40 años y más, y al final el resto de la población en la llamada etapa 5, que va de junio de 2021 a marzo de 2022, es decir, bastante tiempo de espera para los jóvenes.

La decisión del gobierno mexicano es de las más pragmáticas y no se ha complicado la vida en hacer clasificaciones, mismas que, como estamos viendo, provocan no sólo un asunto burocrático sino uno ético: decidir a quienes preservar primero.