Pese a la “tregua navideña” entre Rusia y Ucrania, los ataques y bombardeos no cesan. En esta ocasión, las autoridades del país invadido informaron que la zona este recibió varios impactos, aunque aclararon que los mismos se produjeron pocas horas antes del inicio de la tregua.
Cabe recordar que el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó la víspera a sus tropas un cese al fuego, siguiendo el llamado del patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kirill, y del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Sin embargo, el anuncio no fue bien recibido por Ucrania ni Estados Unidos, que consideraron la acción como una “señal de debilidad” y una “manipulación (de Putin) mediante la cual el agresor intenta ocultar sus verdaderos planes e intenciones militares”.
El ejército ruso aseguró, sin embargo, respetar su tregua y acusó a las tropas ucranianas de “seguir bombardeando las ciudades y las posiciones rusas”.
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El jefe adjunto de la administración presidencial ucraniana, Kirilo Timoshenko, informó de dos bombardeos rusos en Kramatorsk y otro en Kurakhove, en el este. Reportó también un bombardeo ruso en Jersón (sur).
En la región de Lugansk (este), las autoridades locales dieron parte de 14 tiros de artillería y señalaron que los civiles se quedaron “todo el día en sus sótanos”.
Por su parte, Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, dijo a los medios que “El Kremlin no tiene ninguna credibilidad y esta declaración de un alto el fuego no resulta creíble. La respuesta que nos viene a todos a la cabeza es el escepticismo ante tanta hipocresía”, fueron sus palabras.
Este viernes también marcó un nuevo aumento en la ayuda estadounidense a Ucrania, ya que se confirmó la entrega de un apoyo por 2.85 mil millones de dólares. El gesto viene en un momento en el que la potencia americana se prepara para ayudar con el entrenamiento de los nuevos reclutas ucranianos, el cual comenzará a finales de este mes.
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