Si tienes granitos en las mejillas o se te notan las venitas rojas en la cara, es probable que tengas rosácea que es uno de los problemas de la piel más comunes que, por lo general, viene acompañado de piel sensible.
Para atenderlo es recomendable que acudas con tu dermatólogo, pero una gran opción para complementar el tratamiento tópico es también recurrir a la aparatología.
El láser V-beam es la técnica más precisa y segura, para eliminar los vasos capilares a nivel superficial. Esos vasitos son tan pequeños que no los alcanzamos a ver, pero son los culpables de que la piel se vea roja.
Cada sesión dura alrededor de 15 minutos y depende de la cantidad de disparos que te den y lo mejor que no duele nada. Al terminar hay que utilizar un protector solar y listo, no deja irritación ni moretones o sensibilidad.
Una vez concluido el tratamiento, aparece una pequeña costra oscura que se desprenderá de forma espontánea entre cinco y siete días, después solo tienes que aplicar un protector solar, si se trata de áreas foto expuestas.
A lo largo de las semanas posteriores, se regenerará poco a poco la piel que queda por debajo de la lesión hasta recuperar su tono normal.
El tratamiento con Láser V-Beam es más recomendable en épocas de menos exposición solar y calor (no indicada en meses de verano).
Contraindicaciones
Durante la primera consulta, se realiza una historia médica completa para analizar posibles contraindicaciones y situaciones especiales como:
Existen varias clínicas en la Ciudad de México en donde se realiza este tratamiento que oscila entre los cinco y seis mil pesos. Recuerda que es importante que verifiques que estos lugares estén certificados y atendidos por médicos especializados.