El director de Calificación Soberana para la región de Standard & Poors, Sebastián Briozzo alertó que será difícil para México mantener su calificación crediticia si las deudas de Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) se incrementan.
Asimismo, refirió durante su participación en un seminario web que hasta ahora, la deuda en México corresponde al 47 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), sin embargo, señaló que si a este se le suma la deuda de Pemex y CFE, el porcentaje sube hasta 60 por ciento.
En ese sentido, detalló que si los niveles de deuda se incrementan aún más, es posible que México pierda la calificación que mantiene hasta ahora, la cual es de BBB con perspectiva negativa.
Fue apenas el 26 de marzo cuando S&P bajó la perspectiva para México de BBB+ a BBB, previendo un duro impacto del confinamiento por Covid-19 en la economía mexicana.
De acuerdo con la calificadora, el ajuste se realizó ante una combinación de situaciones en torno al Covid-19, entre ellos la caída internacional de los costos del petróleo.
Ante la suspensión de actividades por la pandemia, Standard & Poor’s indicó que México estaba en la mira, pues la expansión del virus y la caída en precios del petróleo ponían en riesgo sus calificaciones; tan solo unos días después, la calificadora redujo la nota para nuestro país.
En ese momento la calificadora mostró su preocupación ante el impacto fiscal del petróleo, y el nulo crecimiento de México en 2019, ante lo cual cuestionaron su el Gobierno de México podría dotar de confianza al sector privado para remediar la situación. CJG
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