Ante al aumento en el precio del petróleo crudo en el mercado internacional y la caída en la producción, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que México mantendrá su estabilidad.
El sábado pasado, las instalaciones de la petrolera Aramco, la mayor productora de crudo en el mundo, ubicada en Arabia Saudita, fue atacada con drones lo que ocasionó el corte de la mitad de su producción y generó un alza en el costo de hasta 15 por ciento.
Situación por la cual, durante la conferencia de prensa de este martes, el primer mandatario fue cuestionado, sin embargo, refirió que se realizará un análisis entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), porque a su parecer el evento beneficia el alza en el precio, pues las seis refinerías que existen en el país ahora están produciendo más.
“Tenemos asegurado el abasto de gasolina, sin ningún problema, por importaciones y también porque ha aumentado la capacidad de refinación de las plantas de Pemex, las seis refinerías están produciendo más de lo que producían hace nueve meses, no lo que quisiéramos, pero si más”, afirmó.
En contraste, lo que sí puede perjudicar al país –externó- es que la compra de gasolina y diésel que se hace en el extranjero.
“Es un equilibrio que tenemos que mantener y hacer el análisis. Hoy, precisamente, va a haber una reunión entre hacienda y Pemex, porque por un lado nos beneficia -entre comillas- el aumento en el precio del petróleo crudo que se vende al exterior, pero como somos compradores de gasolinas y de diesel, pues puede perjudicarnos”, aceptó.
López Obrador aseguró que México “está protegido”, gracias a que se logró tener eficacia en Pemex, se empezaron a perforar pozos petroleros y se detuvo la caída en la producción, además de estabilizarla.
“Decirle a los mexicanos que no va a haber variaciones de precios en las gasolinas que vamos a seguir manteniendo el compromiso, que no aumenten el precio de los combustibles en términos reales”, detalló.
De acuerdo a especialistas consultados por El Financiero, la baja en producción en Saudi Aramco podría significar una beneficio de mayores ingresos por exportaciones para Pemex, como dijo el Presidente.
También, se traduciría en un aumento por parte de Hacienda al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que es aplicado a las gasolinas.