Desde 2018, salía a buscar a su hermano Luis, en las calles, en hospitales, cárceles y en las fosas clandestinas. Pero el pasado fin de semana, fue encontrada sin vida en un motel de Providencia, Sonora.
Brenda Jazmín, de 38 años de edad, pertenecía al colectivo Guerreras Buscadoras de Cajeme, por lo que exigieron justicia por su feminicidio.
La mujer fue encontrada sin vida en la habitación de un motel, en dicho municipio, y presentaba señas de tortura y golpes.
Sin embargo, la Fiscalía General de Justicia de Sonora descartó que Brenda Jazmín haya sido víctima de feminicidio a causa del activismo que realizaba, en búsqueda de su hermano desaparecido.
De acuerdo con trabajadores del motel, el pasado domingo, la mujer entró al motel acompañada de un individuo en un vehículo, y dos horas más tardes él salió solo, argumentando que iría a la tienda a realizar unas compras, pero que su pareja continuaba en la habitación.
Es triste e indignante leer notas de hechos violentos en nuestro municipio, pero es doloroso normalizar que asesinar a personas es el pan de cada día en Cajeme”, cuestionaron las Guerreras Buscadoras de Cajeme y exigieron justicia.
Desde el 1 de diciembre de 2018, cuando su hermano Luis Heraldo Beltrán Jaime fue secuestrado en Bácum, Brenda Jazmín inició la búsqueda incansable.
Justo hace un año, el 15 de julio del 2021, otra buscadora, Aranza Ramos, del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, fue asesinada a balazos en la comunidad de Ortiz, en Guaymas.
Ramos buscaba desde el 6 de diciembre de 2020 a su esposo Brayan Omar Celaya Alvarado, no buscaba culpables ni justicia, “solo buscaba paz y darle un lugar digno al amor de su vida y al padre de su hija”. MAAZ
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