Colombianos piden revisar pláticas de paz con las FARC
Tras la retención del general Rubén Darío Álzate sectores políticos y sociales piden replantear acuerdos mínimos humanitarios

EJECENTRAL
La crisis en los diálogos de paz con las rebeldes FARC por la retención del general Rubén Darío Álzate, obliga a las partes, según sectores políticos y sociales, a replantear unos acuerdos mínimos humanitarios o un cese al fuego bilateral o unilateral.
Las guerrillas de las FARC secuestraron el pasado 16 de noviembre al general Rubén Darío Álzate, un suboficial y una abogada que trabaja con el Ejército, quienes fueron liberados este domingo en el departamento del Chocó, en la frontera con Panamá.
En 50 años de guerra interna en Colombia, la insurgencia por primera vez retuvo a un general de las Fuerzas Militares, un caso que se dio en medio de las negociaciones de paz en La Habana entre el gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Este hecho generó un impacto sin precedentes en la historia militar de Colombia y obligó al jefe de Estado a suspender de inmediato las conversaciones en La Habana, a pesar de la decisión de negociar en medio de la confrontación armada.
Las partes acordaron en 2012 negociar sin cese al fuego y garantizar que las operaciones militares entre las partes en el territorio colombiano no afectarían los diálogos en La Habana, cuyo objetivo es lograr un pacto para terminar la guerra.
La guerrilla, el gobierno de Santos, los partidos políticos oficialistas como los opositores, organizaciones no gubernamentales, coincidieron que el caso del general Álzate, tiene que llevar a una revisión de la forma como las partes negocian en La Habana.
Tal revisión tendría que llevar a replantear el concepto de “negociar en medio de la guerra”, que es un hecho inédito en el mundo.