Las cada vez más elevadas probabilidades de una recesión en Estados Unidos, la economía más grande del planeta, frenaron a las bolsas de valores y al petróleo, dato que se traduce como un menor consumo energético alrededor del mundo.
Las bolsas de Nueva York cayeron marginalmente, pero extendieron las bajas previas. Los índices Dow Jones y Nasdaq Compuesto cedieron 0.15%, cada uno; el S&P500 bajó 0.13%. en México, la bolsa de valores se contrajo 2 por ciento.
El petróleo llegó a descender más de 6% en la sesión de este miércoles, aunque no obstante, logró minimizar las pérdidas a fin de la jornada. El crudo Brent cotizado en Londres terminó con una caída de 3.98%; mientras que el energético de Texas, el WTI cedió 4.77 por ciento.
Además de una probable recesión, los precios de los energéticos respondieron a una propuesta de cero impuestos en Estados Unidos a las gasolinas y el Diésel.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió al Congreso eliminar los impuestos en los combustibles por tres meses para ayudar a detener los efectos inflacionarios. Sin embargo, expertos mencionan que esa decisión lo único que generará será un efecto adverso, ya que los consumidores saldrán a comprar más combustibles “baratos” lo que elevará la demanda y hará un rebote en los precios por una oferta estrecha.
Estados Unidos está inmerso en un grave problema de inflación derivado de los altos costos de la energía que están dañando el ingreso y gasto de los estadounidenses, y por lo que ya se prevé una recesión derivada en parte por estos motivos. En Europa, las bolsas tuvieron caídas generalizadas de alrededor de 1 por ciento. El peso mexicano se desligó de las pérdidas y anotó su mejor cierre en un mes por un esperado aumento de la tasa de interés de Banco de México.
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