España aprieta el cinturón a las empresas energéticas y bancarias
Con nuevos gravámenes, el gobierno espera recaudar al menos dos mil millones de euros, que usará para atenuar los efectos de la inflación
En Europa, la crisis económica que dejó la pandemia se sumó a las consecuencias de la guerra en Ucrania y su golpe se ha agudizado en España, en donde entró en vigor un impuesto adicional a empresas energéticas y financieras con el objetivo de reducir el impacto de la inflación en el bolsillo de las familias españolas.
La medida se enfoca principalmente en los bancos, y si bien no se han dado detalles de la forma en que se aplicará, se sabe que afectará a los bancos que facturen más de mil millones de euros al año con una recaudación aproximadamente mil 500 millones por ejercicio.
Este impuesto fue calificado de “improvisación jurídica” por la Asociación Española de Banca (AEB), y a través de su portavoz, José Luis Martínez Campuzano, denunció que no se han dado a conocer los detalles sobre el anuncio del nuevo gravamen, además de que “las entidades no han sido consultadas ni informadas a pesar de mantener un diálogo permanente con el Gobierno”.
En lo que concierne a las compañías dedicadas a la energía, el presidente de España, Pedro Sánchez anunció que se amplían las medidas que se tomaron hace tres semanas, las cuales incluyen aumento de los recargos para rebajar la factura de la luz, entre otras acciones.
En esta ocasión, se especificó que se tomarán en cuenta a las empresas que facturen al menos mil millones de euros al año y los beneficios que obtengan este año y en 2023. Con esto se espera recaudar al menos dos mil millones de euros al año.
Cabe destacar que las compañías del sector energético están entre las entidades que más se han visto beneficiadas por el aumento de precios que se ha visto en los últimos meses, y entre ellas, las dedicadas a los petrolíferos son las más privilegiadas.