Pocas horas después de que en Palacio Nacional se firmaran “addendums” al T-MEC, el Departamento del Trabajo de los Estados Unidos abrió una bolsa de trabajo para buscar agregados laborales en México.
“El solicitante seleccionado será asignado para servir en la Embajada de los Estados Unidos ubicada en la Ciudad de México, México al momento de la cita o en algún momento después de la cita”, se detalla en la descripción del puesto.
En las responsabilidades del puesto se especifica que la “selección depende de la aprobación del país anfitrión”,es decir, México.
Entre las responsabilidades descritas por Departamento del Trabajo de EU se señala que el candidato deberá “trabaja para promover los derechos de los trabajadores, mejorar las condiciones laborales, abordar la explotación laboral de niños y otras poblaciones vulnerables, y ayudar al gobierno de los Estados Unidos a comprender y responder a las condiciones cambiantes del mercado laboral en México”.
Además se espera que la persona que ocupe el puesto realice informes, verbales o escrito, “puntuales y analíticos” y responda a las consultas de las agencias del gobierno estadounidense, el Departamento de Estado y el Representante de Comercio, así como cuestiones y desarrollos laborales.
El gobierno de Donald trump busca a alguien que pueda apoyar “la provisión y supervisión de asistencia técnica relacionada con el trabajo al gobierno mexicano y a las partes interesadas relevantes para fortalecer la implementación de reformas legales consistentes con las normas laborales internacionales, combatir el trabajo infantil y el trabajo forzado, y promover la aplicación efectiva de las leyes y regulaciones laborales”.
Todo el fin de semana Jesús Seade, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, señaló que México rechaza la iniciativa de ley, adicional al T-MEC, presentada por la Cámara de Representantes de Estados Unidos en la que se contempla la designación de 5 inspectores laborales para que vigilen la implementación de la reforma laboral en nuestro país.
“Esta disposición, fruto de decisiones políticas del Congreso y la administración de Estados Unidos, no fue, por razones evidente, consultada con México”, señaló el subsecretario el sábado pasado.
Dijo que se trata de “una legislación auxiliar del ámbito interno de los Estados Unidos”, por lo que “México desarrollará legislación secundaria, de manera similar, para armonizar lo dispuesto en el tratado”.
El gobierno estadounidense omite información sobre el sueldo de la vacante. RB
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