En medio de la controversia por el asilo político de Evo Morales en México, hubo una lluvia de comentarios a favor y en contra. En redes sociales e incluso algunos medios de comunicación se comentaron que el PIB per cápita de los bolivianos en los 13 de años de su gobierno, más que se duplicó. EjeCentral verificó la información del Banco Mundial que muestra que tuvo el cuarto mayor crecimiento, por debajo de Panamá, República Dominicana y Uruguay.
De 2006, hasta 2018, el PIB per cápita de Bolivia pasó de 4,779 a 6,986 dólares, es decir aumentó en términos reales 46.2%, cifra muy superior al 8.8% que registró México y el 30.4% del promedio mundial. Sin embargo, en la región Panamá reportó el mayor incremento con 78.0%, seguido de República Dominicana con 60.5% y el 54.8% de Paraguay.
El análisis de EjeCentral es contraria a lo que señalan algunos medios. Por ejemplo, Televisa señaló “el PIB per cápita, ingreso promediado (sic), aumentó en 191%, pasó de mil 219 dólares a tres mil 549 anuales”.
Para dimensionar el PIB por habitante de los bolivianos en 2018 es similar al que registraron los estados de Hidalgo (7,012 dólares) o Veracruz (6,866 dólares), que son las entidades que se ubican en el nivel 24 y 25 en esa variable. Actualmente, la Ciudad de México es de alrededor de 22 mil 650 dólares.
La Ciudad de México, la mayor economía de México, tiene un PIB per cápita similar a Panamá, el país más dinámico en el periodo de análisis con 22 mil 674 dólares, según los datos del Banco Mundial.
En Uruguay fue de 20 mil 916 y en la República Dominicana de 15 mil 821 dólares. Comparativamente, con México, Uruguay está por debajo de la Ciudad de México y supera a Nuevo León (17,953 dólares) y el país caribeño estaría entre Baja California Sur (15,616 dólares) y Coahuila (15,562 dólares), que ocupan la cuarta y quinta posición en el territorio nacional.
Un dato, curioso que se desprende de los datos del Banco Mundial, es que considerando el incremento real del PIB de los bolivianos en 2018, se necesitarían 77 años para llegar a un nivel similar al PIB por habitante de los mexicanos.