El día de hoy se retoman clases en múltiples modalidades, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que ya era necesario asumir que, después de año y medio, debimos haber aprendido a cuidarnos, ya que la salud es responsabilidad de cada quien y entre todos debemos recuperar las actividades.
La pandemia ha expuesto de muchas formas el tipo de sociedad que somos. Por un lado resiliente, por otro lado muy violenta y por último saqueadora. Sí, esto es muy negativo, lo mismo cuando ocurre un accidente en las carreteras con un camión que deja la carga en el asfalto, el resultado la mayoría de las veces es que la gente se roba la mercancía. Pues la novedad es que para que los papás puedan llevar de manera presencial a sus hijos a la escuela, se les tuvo primero que notificar que en más de 18 meses, a las escuelas no se les dio mantenimiento, pero lo segundo es que al puro estilo de una sociedad poco o nada civilizada, más del 70% de las escuelas fueron saqueadas.
En qué consiste el saqueo, pues por decir lo más sencillo, no hay pizarrones, computadoras, en algunos lugares los destrozos son en pupitres, laboratorios, en los baños no hay tanques de agua, en otros lugares se robaron la tubería de cobre, tinacos, entonces no hay ni agua para lavar las manos.
Una última situación que no facilita el regreso a clases seguro es que no hubo mantenimiento, entonces el resultado después de un año y medio en el que no se cortó el pasto, no se lavó nada, muchas cosas dejaron de funcionar y el reparar todo es imposible, ya que el costo es elevado. Muchos directores de escuelas en la escala básica, al reunirse en las juntas previas con los padres de familia, además de la lista de útiles, les solicitaron un aproximado de dos galones de cloro por alumno, un litro de gel antibacterial, ya que al parecer el que proporcionarán no es del 70% de alcohol, como es recomendado.
De forma y fondo, la educación de esta generación de pandemia debe ser tratada de ahora en adelante como un tema de seguridad nacional, si no queremos que el país se pierda de más de tres generaciones, lo cual además de poco progreso y mayor desigualdad, no ayuda a que demos el salto a un país de primer mundo. La frase de “por eso no somos Alemania”, es bajo el contexto de una sociedad que saquea en lugar de respetar, cuidar y mantener lo que se tiene, como son las instalaciones escolares. Esto, aunado al fenómeno de deserción y lo ocurrido con toma de instalaciones de las preparatorias y algunas universidades.
Nota al pie de página:
Hay que darle seguimiento al proceso de sanción que el rector de la UNAM ha realizado en contra del Director del Instituto de Investigaciones Estéticas, por hablar de manera incorrecta de la violencia feminicida y de Género.